

La victoria ante Newell’s por 1-0 en Rosario llevó calma a Boca, que quedó a un paso de la Copa Libertadores 2025 (debe esperar que no salgan campeón Huracán y Central Córdoba juntos), pero también dejó preocupación por dos de los titulares que utilizó Fernando Gago: Frank Fabra y Edinson Cavani, quienes fueron reemplazados.
El atacante uruguayo, quien disputó su cuarto partido al hilo como titular -había sido suplente con Unión por llegar tarde a la charla técnica- venía de jugar los 90 minutos frente a Gimnasia y esta vez tuvo que dejar la cancha a los 84 por una molestia en el gemelo de su pierna izquierda.
Si bien salió por sus propios medios, al Matador se lo vio rengueando y pareció haber sufrido un calambre en la zona del gemelo, aunque habrá que esperar cómo evoluciona en la semana. La buena para el técnico es que en su lugar entró Miguel Merentiel, quien viene de superar un desgarro, y el próximo y último partido de Boca, ante Independiente, no modificará el lugar en la tabla anual, ya que el Xeneize se aseguró terminar quinto.
Por su parte, el lateral colombiano, a quien Pintita le devolvió la confianza después de haber perdido bastante terreno con Diego Martínez, fue reemplazado por Lautaro Blanco, que pasó de titular a ser el tercer marcador izquierdo, a falta de tres minutos.
Lo del jugador de 33 años pareció ser una molestia similar a la de Cavani porque después de ir al piso para intentar recuperar una pelota quedó tendido y fue rápidamente asistido por un rival, quien lo ayudó a elongar el gemelo izquierdo, lo que señala que padeció una contractura. Por esa razón dejó la cancha en el carrito.
Gimnasia se fue silbado y Méndez sentó postura con sus declaraciones
Marcelo Méndez fue muy duro en la sala de conferencias post derrota contra Talleres. El uruguayo, muy simple y fastidiado, expresó que: “Necesitamos jerarquía. Lo ideal sería cantidad y calidad. Los objetivos del próximo año los vamos a definir en base a lo que llegue en el mercado de pases. Necesitamos mejorar el mercado anterior. Muchísimo”, consideró Méndez.
Tras haber traído 18 jugadores a lo largo del año ahora la situación apremia y no hay que volver a fallar. En su mayoría de esas incorporaciones no funcionaron y Méndez también fue responsable: “Lo ideal serían las dos cosas, calidad y cantidad. Necesitamos jerarquía de verdad. Si el objetivo es clasificar a copas y competir en los torneos, necesitamos jerarquía, calidad, cantidad… y no traer por traer”, afirmó. “La idea es formar un plantel y que yo pueda decidir cuál es el mejor sistema para cada partido, no atarse a un sistema. La idea es nutrir al plantel. Necesitamos mejorar el período de pases anterior”.
La mejora de Talleres desde que llegó el Cacique Medina
El Cacique, quien había dirigido a la T entre mediados de 2019 y 2021, regresó a la institución tras la salida de Walter Ribonetto por la eliminación ante River en la Copa Libertadores y la derrota frente a San Lorenzo en el torneo local. Más allá de que su ciclo arrancó con varias caídas (la más dura ante Boca en la Copa Argentina) y empates, acumula cinco victorias consecutivas.
El uruguayo logró revitalizar a un equipo que venía teniendo un certamen muy irregular y aprovechó la merma en el rendimiento que tuvo el Fortín, por lo que lo alcanzó. Sin embargo, para dar la vuelta olímpica no depende de sí mismo y necesitará una ayuda extra.
“Como cuerpo técnico tenemos menos de 100 días y llegar a esta chance es para agradecerles a los jugadores. Estamos a 90 minutos de todo. Y ojalá podamos conseguir este torneo”, dijo el Cacique tras el partido.
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Tras su arribo, de a poco Medina le fue dando minutos al argentino Matías Galarza que llegó en el último mercado, mientras que el paraguayo que se llama igual se volvió una pieza clave y hasta marcó goles importantes. Rubén Botta ya había demostrado su valía y en el ataque hay varios que levantaron su nivel, como Cristian Tarragona, que fue titular en La Plata, Bruno Barticciotto, que recuperó su desempeño en el primer semestre y anotó ante el Lobo, y Federico Girotti.