Tras cinco días de entrenamiento y partidos amistosos en las instalaciones de la UNLaM
La Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) concluyó su intercambio deportivo con la selección juvenil de vóley de Chile que se prepara para el Panamericano que se desarrollará en Cuba.
El lunes por la mañana, las jugadoras llegaron al país y se acercaron a esta Casa de Altos Estudios para conocer las instalaciones en las que se entrenaron durante toda la semana.
El martes, participaron de un triangular con la selección argentina sub 19 y el equipo de División de Honor de la Universidad. El miércoles y jueves, en tanto, disputaron partidos de entrenamiento con distintos conjuntos de las divisionales menores, el equipo de Primera y la División de Honor de la UNLaM.
Ya el viernes por la mañana, las dirigidas por Eduardo Guillaume jugaron el último encuentro de ensayo, almorzaron y retornaron a Chile, donde continuarán con su preparación.
Con la meta de generar un ámbito de integración más allá de las competencias, las jugadoras chilenas se albergaron en los hogares de las voleibolistas matanceras.
“Nos sirvió mucho para entrenar, conocernos más entre nosotras y al entrenador, quien llegó hace poco. La idea era congeniar todo el equipo y conocer a las chicas nuevas. Fue muy bueno todo lo que vivimos”, dijo Paula Salinas, armadora de la selección trasandina.
Beatriz Novoa, punta del team chileno, comentó: “El partido contra Argentina fue el más difícil, pero el más real también. Después, todos los partidos con la UNLaM, que son distintos equipos y juegan muy parecidos, también, nos sirvieron para ponernos en ritmo”.
Para finalizar, Catalina Núñez, armadora del seleccionado, agradeció la atención de toda la comunidad universitaria: “La Universidad nos acogió y nos han tratado muy bien”.
