
El Sindicato de Empleados de Comercio y Afines Zona Oeste, desea manifestar su más sentido agradecimiento a todos los sectores que componen la cadena productiva de la economía y que, con inquebrantable convicción, acompañaron el paro general del pasado lunes 25 de Junio dispuesto por la Confederación General del Trabajo de la República Argentina.
Por Prensa SEOCA
GRACIAS a las diversas “pymes” que apuestan al crecimiento de nuestro país, generando una innumerable cantidad de puestos de trabajo en la zona oeste. Este sector es, seguramente, uno de los más castigados como consecuencia de las políticas económicas que el gobierno neoliberal está llevando adelante. Sin embargo, una infinidad de estas pequeñas y medianas empresas, el pasado lunes decidieron cerrar sus puertas como forma de solidarizarse con los trabajadores. Comprendiendo, además, que sin salarios y condiciones de trabajo dignas, sin un modelo económico que tenga como objetivo el fortalecimiento del mercado interno, el desarrollo de una industria nacional pujante, no habrá posibilidad alguna de que este eslabon fundamental de la cadena productiva, hoy en estado casi crítico, pueda sobrevivir mucho tiempo más.
GRACIAS a la enorme cantidad de comerciantes que conforman los centros comerciales de la zona oeste. Gracias porque son conscientes de la cruda realidad que la comunidad toda está atravesando. Ellos, son los principales damnificados de la estrepitosa caída en las ventas como consecuencia de los aumentos constantes en los precios de la canasta básica y la recesión que atraviesa la economía de nuestro país. Justamente, nos acompañaron porque comprenden que sin un cambio de rumbo urgente, a ellos también les depara un abismo.
GRACIAS a todos los delegados de los distintos establecimientos de la zona oeste. Comprometidos con la defensa de los derechos de sus compañeros, con el cuidado de su integridad física, con la paciencia para convencer, mediante el uso irrenunciable de la palabra, a quienes aún tienen temor a las represalias. Gracias porque los convencieron de que sin lucha y resistencia no habrá augurios de JUSTICIA ni PAZ SOCIAL.
Por último, GRACIAS A TODOS LOS TRABAJADORES. Interpretamos con orgullo en estos hechos, una re significación de la palabra TRABAJADOR, tan devaluada en estos tiempos, al igual que nuestra economía. La organización del conjunto de los trabajadores en defensa de sus intereses y de los intereses del conjunto de la “comunidad organizada”, que los argentinos de bien anhelamos, ponen de manifiesto la relevancia fundamental de este actor a la hora de generar la riqueza de una patria LIBRE, JUSTA y SOBERANA.