
La iniciativa resulta de un trabajo conjunto entre la Universidad Argentina de la Empresa y el Servicio Geológico Minero Argentino.

En el ámbito productivo, el litio se constituyó, en los últimos años, como una materia prima moderna y en ascenso en relación al nivel de demanda del mismo y por la diversidad de usos a los que puede dar lugar.
En este contexto, la Argentina se constituye como una de las más importantes fuentes del elemento mencionado, cuya reserva principal se encuentra en los salares de la Punta en la región del norte del país.
En ese aspecto, esta semana se presentó el proyecto científico-tecnológico desarrollado por la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) y el Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR) que apunta a posicionar la minería urbana y la biominería como una forma alternativa de extracción de litio.
Desarrollo de la investigación
En cuanto al contexto en el que se empezó el estudio, el informe consultado recordó que se dio “entre los años 2019 y 2021, con base en el convenio marco entre la UADE y SEGEMAR”.
Asimismo, el reporte señaló que el proyecto está liderado por las investigadoras Dra. Melisa Olivelli (UADE), Dra. Romina Gargarello (UADE) y la Lic. Laura Sánchez, directora del Centro de Procesamiento de Minerales de INTEMIN-SEGEMAR.
Por otra parte, y vinculado a las implicancias de la minería urbana, la investigación explicó que “recicla y recupera el litio y otros metales a partir de desechos tecnológicos que, en ocasiones, debido a su creciente volumen y muchas veces destino incierto, se convierten en potenciales fuentes de contaminación del ambiente”.
Mientras tanto y con respecto a la biominería, el estudió precisó: “Abarca una serie de procesos que utilizan microorganismos para la recuperación de metales a partir de minerales y otras fuentes”.
Usos del litio y avances del proyecto
En lo que respecta a la demanda del litio, la investigación especificó que “puede ser escindida en dos categorías generales: usos tradicionales y baterías recargables, principalmente destinadas a los vehículos eléctricos”.
“Dentro de la categoría usos tradicionales se encuentran vidrios y cerámicas, donde el litio otorga determinados beneficios, como mayor adhesión y dureza. Otro uso clásico es el de aplicación a grasas y lubricantes para lograr una mayor manipulación de los materiales en contextos térmicos adversos”, explicó el estudio consultado.
A su vez, el reporte indicó que el elemento también tiene otras aplicaciones como por ejemplo en “diversas fases de la cadena de valor de las industrias plásticas, producción de medicamentos y cuidado de la salud, secado industrial y placas de blindaje, entre otros”.
En cuanto a los usos relacionados con las baterías, el escrito detalló: “Están en relación con los dispositivos electrónicos, por ejemplo, las baterías de dispositivos móviles (smartphones), los controladores de consolas de juego o dispositivos médicos u otros relacionados con la industria de la salud y a la electromovilidad”.
“Un rasgo importante a tener en cuenta es que el 95 por ciento del litio que se utiliza en las baterías es reutilizable, lo que esgrime a futuro, una posibilidad de sustituibilidad frente a un fuerte aumento de precios”, puntualizó y destacó el material facilitado a Diario NCO.
Finalmente, el estudio subrayó que “se proyecta que para 2025, los usuarios de smartphones en Argentina superarán los 40 millones. Así, el proyecto entre la UADE y el SEGEMAR buscó potenciar la utilización de procesos innovadores como una alternativa y/o complemento a la explotación del litio desde fuentes naturales”.
Fuente fotografía: argentina.gob.ar y elespanol.com