Un joven de 25 años fue detenido en el partido bonaerense de La Matanza, acusado de ser el autor material de los disparos con los que fue asesinado un repartidor de frutas y verduras en la localidad de San Justo.
El hecho ocurrió, cuando efectivos dependientes de la Jefatura Distrital La Matanza Noroeste en conjunto con personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) La Matanza realizaron un allanamiento en un asentamiento de la zona y lograron apresar al presunto asesino.
Según dijeron los voceros consultados, en los procedimientos, llevados a cabo por orden del fiscal de homicidios de La Matanza que entiende en la causa, José Luis Maroto, no fueron hallados ni el arma homicida ni la motocicleta en la que se trasladaban los delincuentes cuando atacaron a Nicolás Mariano Rodríguez (30).
El joven pudo ser individualizado luego de que distintos vecinos de la zona en la que ocurrió el hecho brindaran su testimonio y que los técnicos policiales analizaran las grabaciones de las cámaras de seguridad monitoreadas desde el Centro de Operaciones Municipales (COM).
Es que distintas cámaras del municipio captaron el paso de la motocicleta en la que circulaban el ahora detenido y su cómplice, señalados como integrantes de una banda a la que se le adjudican varios hechos de robo a mano armada en el oeste del conurbano bonaerense, conocida como “La Banda de los Melli”.
De acuerdo a lo relatado por las fuentes, el cómplice del presunto homicida permanece prófugo, aunque también fue identificado y los pesquisas llevaban adelante diversos operativos procurando su detención.
El homicidio de Rodríguez ocurrió en Moldes 3036 de San Justo, partido de La Matanza, cuando la víctima padre de una beba de una semana, llegaba a la vivienda de su padre, como todos los días, para guardar su Fiat Punto y tomar un camión familiar con el que iría al Mercado Central para repartir en confiterías y restaurantes.
Rodríguez fue sorprendido cuando ya estaba arriba del auto, luego de abrir el portón del garaje, por dos asaltantes que estaban a bordo de una moto y lo amenazaron con armas.
Como el repartidor intentó resistirse y escapar en el auto, los ladrones comenzaron a dispararle mientras lo perseguían y le tiraron once balazos, de los cuales le impactaron dos que lo hicieron chocar contra un árbol.
Tras el asesinato, los delincuentes escaparon del lugar sin concretar el robo.
De acuerdo con la autopsia realizada sobre el cadáver de la víctima, el muchacho recibió un tiro en el pecho que le salió por el hombro derecho y otro en el brazo que le atravesó un pulmón y el hígado y fue el que le provocó la muerte.
También se detectó un roce de una bala en la cadera, que le rebotó en el hueso, pero no le ingresó al cuerpo.
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Matan a balazos a un repartidor al tratar de robarle el auto en San Justo
Un repartidor de frutas y verduras de 30 años fue asesinado hoy de dos balazos por dos delincuentes, que intentaron robarle el auto cuando llegaba a la casa de sus padres en la localidad bonaerense de San Justo, informaron fuentes policiales y judiciales.
El hecho ocurrió a la 1.30 en Moldes 3036, cuando Nicolás Mariano Rodríguez, padre de una beba de una semana, llegaba a la vivienda de su padre, como todos los días, para guardar su Fiat Punto y tomar un camión familiar con el que iría al Mercado Central para repartir en confiterías y restaurantes.
Rodríguez fue sorprendido cuando ya estaba arriba del auto, luego de abrir el portón del garaje, por dos asaltantes que estaban a bordo de una moto y lo amenazaron con armas.
Como el repartidor intentó resistirse y escapar en el auto, los ladrones comenzaron a dispararle mientras lo perseguían y le tiraron once balazos, de los cuales le impactaron dos que lo hicieron chocar contra un árbol.
Sergio Rodríguez, padre del repartidor vio y escuchó la llegada de su hijo para guardar su vehículo y, al advertir las detonaciones, salió a la calle donde vio el auto chocado en Moldes y Bermejo, a una cuadra y media de su vivienda, y el cuerpo de su hijo recostado sobre el volante.
“Es un auto que teníamos, de la familia. El estaba casado y vivía con la familia en Ramos Mejía, sólo venía acá para empezar el trabajo, como todas las mañanas, ya que se dedicaba al reparto en la Capital de frutas y verduras”, explicó el padre a la prensa.
“Lo corrieron en una moto de alta cilindrada, pero también me dicen que había un auto (Volkswagen) Bora. El fue padre hace una semana tras la búsqueda de varios meses de un bebé. La mujer dio a luz una hermosa beba que es la luz de todos nosotros”, sostuvo el hombre.
De acuerdo con la autopsia realizada esta tarde, el muchacho recibió un tiro en el pecho que le salió por el hombro derecho y otro en el brazo que le atravesó un pulmón y el hígado y fue el que le provocó la muerte.
También se detectó un roce de una bala en la cadera, que le rebotó en el hueso, peor no le ingresó al cuerpo.
Tras el asesinato, los delincuentes escaparon del lugar sin concretar el robo, agregan los informantes a Télam.
Además de la declaración del padre, otros testigos, en tanto, deslizaron la versión de que los dos delincuentes que estaban en la moto iban acompañados por otros a bordo de un auto, que se habrían sumado a la persecución de la víctima.
Tras el peritaje efectuado en la puerta de la casa de la familia Rodríguez y donde la víctima chocó su auto, los efectivos secuestraron un total de 11 vainas servidas de un arma calibre 9 milímetros, además de otras pruebas que serán parte de la investigación para lograr capturar a los delincuentes.
El episodio es investigado por personal de la Jefatura Distrital de San Justo y la DDI de La Matanza, con la intervención judicial de la fiscalía de Homicidios de La Matanza, a cargo de José Luis Maroto, quien trabajó en el lugar del hecho para la recolección de pruebas.