Luego de la medida tomada por diversos gremios docentes, La Matanza se vio afectada por el paro de los trabajadores de la educación. NCO estuvo recorriendo varios establecimientos del partido donde se mezclaron las protesta, el enojo de los padres y la empatía de otros.
Por: Patricia Dávila
patriciasdavila@gmail.com
Tras la medida de fuerza que se realiza en gran parte del país, la provincia de Buenos Aires no estuvo ajena a este conflicto donde miles de docentes realizan un paro de actividades, debido a que varios gremios promovieron un cese de tareas por 48 horas, y otros de 72 horas.
La palabra oficial
Con respecto a este tema, el jefe de gabinete, Jorge Capitanich en su habitual conferencia de prensa, destacó que “no hemos podido arribar a un acuerdo porque los temas que tienen que ver con el monto de cada uno de los pedidos no era compatible con la capacidad de pago. No precisamente por el Estado Nacional, si no por los Estados Provinciales”.
Cabe destacar que la propuesta salarial del gobierno contemplaba el incremento salarial del 31% a pagarse en cuotas entre marzo 2014 y julio 2015; la primera cuota de 12% se cobrara en marzo, la segunda, de 5%, en agosto, la tercera, del mismo monto, en noviembre, y la cuarta y última, de 9%, se percibiría en marzo de 2015. Otro de los puntos que más conflicto generó fue la suma que se pagará por presentismo, cuyo monto de $1.000 se estimaba pagarse en tres veces durante el año lectivo.
Casos testigo
En este contexto, NCO salió a recorrer distintos establecimientos en el que el conflicto docente estuvo a flor de piel, aún más siendo el primer día del ciclo lectivo pautado en el calendario escolar. “Traje a mi hija y me encuentro que no hay clases, me tienen cansada los maestros que se piensan que todos los años es lo mismo, yo necesito trabajar y me había armado el día. Ahora me encuentro con esta situación y no sé dónde mandar a mi nena… No entiendo, ganan bien tienen meses y semanas de vacaciones… no sé qué más quieren” aseveró Mariana Galíndez, vecina de San Justo que se encontraba en la puerta de un colegio privado de la zona.
“Traje a mi hijo más para ver si la maestra de él no se adhería, pero se adhirió. Igualmente los entiendo, como está la situación no se puede vivir así, los apoyo totalmente porque los maestros de esta escuela ponen de su bolsillos hasta para comprar cosas para la escuela, pintarla, arreglar las mesas y hasta para comprarle útiles a chicos que vienen y no tienen recursos. Algunos padres en este caso las ayudamos a las maestras, porque creo que la comunidad somos todos, no me puedo poner en contra de una chica que sigue estudiando, se perfecciona, con el poquito sueldo que tiene hace todo lo que hace y además educa a mi hijo y le enseña a creer en esta sociedad” aclaro Solange Moldes, una madre que parada al lado de la puerta de un establecimiento estatal de Gregorio de Laferrere, charlo con NCO y hablaba también con diversos padres sobre esta medida.
Carta a la comunidad
Dentro de este panorama, esta medida de fuerza se desarrolla con el apoyo de muchos y las réplicas de otros, desde “Docente de Base” de La Matanza, en una carta dirigida para toda la comunidad educativa, describieron: “Ir al supermercado, al almacén del barrio, o pagar el boleto del colectivo es suficiente para comprobar la pérdida del valor adquisitivo de nuestro sueldo”.
“Como contrapartida, nuestros salarios vienen atrasándose en su valor desde el 2009 y este año solo nos ofrecen menos de un 25 por ciento de acá a un año; es decir que nuestros sueldos llegarían a $4300 en el 2015 mientras que la canasta familiar ya hoy supera el doble de esa cifra”.
“No lo podemos permitir. Como tampoco podemos permitir que las escuelas sufran de las mismas carencias que el año pasado: problemáticas edilicias, falta de mantenimiento, cursos superpoblados, falta de agua, de calefacción, pozos que desbordan y contaminan, parálisis de la construcción de aulas y escuelas, que el Estado no se responsabilice ni de las emergencias médicas de nuestros pibes” subrayan.
En consecuencia, enfatizan que “entendemos que defender el salario docente es defender también el salario del conjunto de los trabajadores, de los sectores populares y de la Educación Pública. Nosotros sabemos que esa plata está, pero los gobiernos nacional y provincial quieren destinarla a sus manejos políticos, al pago de la deuda externa, de los fondos buitres y de la indemnización a Repsol, por ejemplo, dejándonos unas migajas. Aparte, por ejemplo se podrían obtener fondos frescos que cubran nuestras necesidades, con una reforma impositiva donde paguen más los que más tienen, gravando la renta financiera y a los grupos sojeros, etc”.
“Rechazamos la idea que el gobierno pretende establecer, que aquel trabajador que reclama por sus derechos genera desestabilización o inflación. Los trabajadores somos las víctimas del tarifazo y la devaluación. Las grandes empresas, los banqueros, los terratenientes y exportadores, acumulan superganancias, y la fugan del país, con la protección del gobierno. Esos son los vaciadores. Por eso éste no es un año lectivo más. Está en juego nuestro futuro y el de sus hijos -también el de los nuestros porque también nosotros somos papás y mamás, o tíos- , y el futuro de la escuela pública, común y gratuita, tan descuidada en tanto el Estado destina importantes sumas a subvencionar la educación privada” agregaron .
Luego concluyeron “por eso les pedimos que nos acompañen en nuestro reclamo, sumándose activamente por una mejor escuela para sus hijos. El gobierno y la televisión como siempre, harán lo posible por dividirnos, alimentar la desconfianza, desprestigiarnos a los ojos de ustedes. Porque saben que si estamos unidos no podrán derrotarnos. Pero en el diálogo franco y en la acción conjunta está la clave del triunfo de nuestras demandas que son absolutamente justas, por eso como dice una imagen que anda por allí: si luchás conmigo, bienvenido, si luchás aparte lo agradezco, si no quieres luchar, te respeto, si me criticás, lo comprendo, pero si intentás detener mi lucha, pierdes tu tiempo, porque estoy seguro de que estoy luchando por mis derechos como trabajador y por algo tan importante como la educación pública…”.