En una entrevista exclusiva con Diario NCO, dialogamos con Pablo Monzalvo, locutor, periodista y corresponsal internacional, acerca del conflicto entre Palestina e Israel luego de su viaje a Jerusalén Este y que observó en los ciudadanos israelíes frente a este panorama.
Por Melanie Aylen Ibarbuden
melanieibarbuden@yahoo.com.ar
Desde el 7 de octubre, estos dos países se enfrentan luego de que el grupo terrorista Hamás ingresara al país israelí durante una fiesta que se estaba realizando cerca de la frontera de Gaza. En el ataque, miles de civiles fueron asesinados y secuestrados, por lo que el conflicto histórico se agravó y parece no tener fin.
Frente a ello, Pablo Monzalvo, corresponsal internacional que trabaja actualmente para Univisión, viajó el 8 de octubre a Israel a pedido del canal para el que trabaja. “Estaba en Italia cubriendo el funeral de Botero cuando pasó lo del 7 de octubre en Israel y me llamaron del canal para llegar allí lo más urgentemente posible”, comenzó Pablo.
Sin embargo, el enfrentamiento era de tal calibre y peligro que los vuelos para llegar a ese país estaban interrumpidos. Los misiles de Hamás caían por todas partes, siendo el aeropuerto internacional israelí un centro clave para la caída de estos proyectiles.
Según el entrevistado, “Univisión tomó la determinación de que me acerque hasta donde se podía, que era hasta Estambul, Turquía, y me quedé 14 horas en el aeropuerto de allí hasta que salieron los primeros vuelos”. Fue así que Monzalvo llegó a Israel el 8 de octubre por la noche y permaneció en el lugar por tres semanas.
El testimonio de los ciudadanos, las víctimas del conflicto
Aunque Monzalvo no es corresponsal de guerra, aceptó el ofrecimiento de Univisión, sumado a que ya había viajado a Israel y conocía mucha gente allí, por lo que detalló: “Me sentí seguro pero puse como condición no ir a la primera línea del frente de batalla, por lo que marqué presencia para el canal y salía todos los días en todos los programas, pero no nos acercamos nunca a las zonas de conflicto”.
Durante su estadía, permaneció en Jerusalén con dos o tres salidas para Tel Aviv y otras ciudades cercanas. En el territorio dialogó con ciudadanos de allí y manifestó que “la gente israelí está acostumbrada a vivir en constante tensión con los palestinos y en particular con Hamás, ya que está en el Gobierno de Gaza desde mediados de la primera década de los años 2000, pero la gente se sorprendió por la magnitud de este ataque”.
Asimismo, Monzalvo añadió que “están acostumbrados a que constantemente caen misiles y mueren muchas personas casi que cada mes, conviven con las sirenas, se meten en los refugios de sus casas… Pero nadie se imaginó que pasaría algo similar a lo del 11 de septiembre en Estados Unidos: cientos de terroristas que matan a 1400 personas y generan con los secuestrados y demás un daño psicológico permanente a la población”.
Es así que los ciudadanos están en pánico desde aquel día y las imágenes de la guerra que surgen durante cada segundo recorren todos los medios aterrorizando más y más a la población Sin embargo, el entrevistado puntualizó: “Hay que ser equilibrados y justos y es que yo hablo de la parte israelí porque estuve allí, aunque mi base era Jerusalén Este, donde viven israelíes árabes, por lo que tenía dos realidades, la de los israelíes judíos y la de los israelíes árabes, que tienen familia en Gaza y en Cisjordania”.
Según Monzalvo, “esa gente ve como su familia los llama para decirles que quizás no pasan la noche porque los bombardeos israelíes son intensos y no respetan lo que se pidió a la gente para ponerla a salvo, porque les decían a los del norte de la Franja de Gaza que se movieran al sur creyendo que los terroristas estaban en el norte y los terroristas se mezclaban entre los civiles para usarlos como escudos, entonces Israel bombardeaba dónde estaba la población, cobrándose la vida de miles de personas”.
Los jóvenes israelíes: los verdaderos héroes
En este último viaje, Monzalvo también tuvo la oportunidad de dialogar con algunos jóvenes israelíes y compartió lo siguiente: “Ellos son objetores de conciencia y no van al ejército. Tiene mil consecuencias no ir al ejército en Israel, pero dicen ‘no voy a ir a dispararle a nadie y menos a un hermano mío, que podemos tener religiones distintas pero somos lo mismo, venimos de Oriente Medio, físicamente somos iguales’”.
Por otra parte, se refirió al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y señaló que “es pro guerra y tiene sed de venganza porque los palestinos asesinaron a uno de sus hermanos, por lo que no sé si es bueno que un gobierno tenga venganza, justicia sí, pero venganza no”.
En el caso de los hijos de Netanyahu, por un lado, Yair, se encuentra viviendo en Miami y no viajó para participar de la guerra, a pesar de que muchos jóvenes israelíes que viven en el exterior fueron llamados para combatir y viajaron hacia allí. Su otro hijo, Benjamín, vive también en el país estadounidense, en Florida precisamente, y tampoco viajó para participar de la guerra, despertando aún más las críticas contra los hijos de Netanyahu.
Finalmente, el entrevistado cerró diciendo que “hasta hoy, van cerca de 17.000 civiles muertos del lado palestino” y que “es una tragedia en la que, a mi humilde entender, todos pierden, es terrible lo que está pasando y es muy difícil de entender el conflicto hasta para mis amigos israelíes que viven ahí”.
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