
Brown de Adrogué volvió a dar la noticia y eliminó al Rojo de la Copa Argentina por penales. Tras la victoria, el joven futbolista, entre lágrimas, se mostró emocionado por un motivo muy especial.
La postal es de película: de fondo está Holan resignado junto a sus dirigidos, golpeados por una dura derrota que los dejó afuera de la Copa Argentina, nada más ni nada menos, que contra un rival que ya supo darle malos gustos cuando los de Avellaneda transitaron en la Primera B Nacional hace no mucho tiempo. Pero las cámaras se centran en Brown de Adrogué, su hinchada y sus jugadores, entre ellos, uno cae en llanto, pero no de tristeza, sino de mera alegría, es Braian Guille, la noticia del momento, pero… ¿quién es él? ¿por qué esa reacción?
Nacido en Olavarría un 31 de julio de 1997, el joven que hoy defiende los colores del Tricolor vino al mundo con una misión: ser futbolista. Y así, en 2013 sería fichado para formar parte de las inferiores de Racing, donde hizo dupla con el goleador Lautaro Martínez, hoy en Italia.
Sin embargo, el salto grande lo haría recién a principios del 2017, cuando Diego Cocca, el entrenador de la Academia en ese entonces, lo mandó a la cancha un poco más de diez minutos frente a Independiente en el estadio Libertadores de América, donde su conjunto cayó 0-2 contra su archirrival.
De allí en más, el delantero juvenil no tuvo más chances con los de Avellaneda y tuvo que ser cedido a Santamarina de Tandil, donde sumó partidos pero no alcanzó: vistió la casaca del Aurinegro en diecinueve oportunidades y convirtió dos goles.
Con hambre de gloria, Guille retornó a Racing con el deseo de que la nueva gestión técnica lo tenga en cuenta, pero no fue así y volvió a ser cedido hasta mitad del próximo año a Brown de Adrogué.
Y los resultados llegaron rápido, siendo Olimpo su primera víctima, en el triunfo 3-0 del Tricolor por el torneo de la B Nacional. Esa tarde, el futbolista se gambeteó al portero rival y sentenció el segundo para su equipo.
Cabe destacar que el atacante disputó todos los partidos hasta el momento, se afianzó a la titularidad, y compró definitivamente al hincha con su gran nivel que demostró frente a Independiente. Tras el cotejo, lloró con emoción mientras sus compañeros festejaban y habló “en caliente” con un periodista de TyC Sports.
“Tuve un debut malo contra Independiente y la chance se me daba hoy, por suerte se nos dio el resultado”, afirmó Guille entre lágrimas, a la vez que agregó: “el mejor arquero que vi en mi vida, te juro”, haciendo referencia a la gran performance de Ríos, el veterano guardametas de 41 años que le contuvo dos penales al Rojo.
De esta manera, Guille volvió a salir al aire ante las cámaras de TyC y sostuvo que vivió el encuentro con mucha intensidad, ya que no era un partido más, sino uno muy especial para él.
“Tuve un paso por Santamarina donde las cosas no salieron muy bien, tuve la culpa yo de que no salga tan bien, estar acá en Brown es un paso muy lindo, este club es una familia, están encima de mí, me dan mucho cariño, es un apoyo de todos que quieren que esté bien”, explayó el jugador.
“Voy a dar lo mejor en Brown sin pensar tanto en Racing, obvio que la ilusión de volver siempre está, pero si no hago las cosas bien en Brown no voy a poder volver a Racing”, adhirió con total certeza.
Automáticamente, las redes sociales explotaron y varios medios relevaron el caso del delantero que revivió el interés de la Academia en su retorno al Cilindro de Avellaneda.
“¡No! RacingClub, no te lo devolvemos. #El7encarador #Guille #Crack”, afirmó a modo de broma el sector de prensa de Brown de Adrogué en su cuenta oficial de Twitter.
Por último, Guille volverá a Racing a mitad del 2019, y la gente del conjunto de Avellaneda ya lo pide. Encarador, con buen pie y un gran desborde, podría ser una fuerte apuesta a futuro para los de Coudet. ¿Lo tendrán en cuenta?
Foto: TyC Sports