La elección infantil que se desarrolló paralelamente a los comicios generales, diseñada para crear conciencia cívica en los niños guatemaltecos, resultó una exitosa experiencia para la que se empadronaron: 579.950 niños de entre 5 y 15 años.
Según informó la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, María Eugenia Villagran de León, se empadronaron chicos de 85 municipios de los 22 departamentos (provincias) del país, para votar presidente y vice de la Nación.
Los centros de votación fueron instalados en centros comerciales y reconocidos restaurantes de la capital guatemalteca, y la misma modalidad se aplicó en los municipios del interior del país.
El comicio infantil cerró a las 17, una hora antes que los generales, y poco antes del cierre sólo en la capital guatemalteca habían sufragado 135.000 chicos.
En la zona 10 de la ciudad capital, también conocida como “Zona Viva” por la cantidad de restaurantes y comercios por donde la gente transita con comodidad aun de noche, cuando esta ciudad se torna más peligrosa, funciona una mesa de votación infantil en un centro comercial.
Allí hasta el mediodía habían votado 140 chicos, según informó a Télam Dwith, de unos 10 años, muy consustanciado con su rol de presidente de mesa, aunque sobre las 16 el espacio estaba desbordado de niños intentando votar.
A escasos tres metros de la mesa de votación los chicos hacían cola para pasar al cuarto oscuro, en rigor un biombo de cartón, para poner una cruz sobre la foto del candidato a presidente de su preferencia y que luego les pintaran con tinta indeleble su dedo índice, igual que ocurre con los mayores.
Yamiria Molinas Ottonte, de 8 años y dentadura con “ventanas”, mostraba orgullosa su índice entintado y la foto que, por unos pocos quetzales abonados por su papá, se llevó como recuerdo de su primer acto cívico.
“¿Por qué votas?”, preguntó Télam. “Por el Partido Patriota. Ah…, ¿por qué? Porque lo vota mi papá”, respondió Yamiria.