Comunicado: ante el anuncio del Gobernador Axel Kicillof, y el Ministro del salud de la provincia de Buenos Aires Daniel Gollán, acompañado del Presidente de nuestra obra social Homero Gilles, no podemos más que declarar nuestro repudio.
Anuncian un sistema “integrado” de salud en el marco de la pandemia mundial de Covid 19 sobre un sistema que reconocen dividido en lo público, en subsistemas como el nacional, provincial, municipal y privado, con un informe del gobernador que se asienta en la necesidad de camas, pero mencionando, que de la anterior administración macrista, al menos 192 establecimientos privados de salud están con dificultades financieras para insumos y pagos de salarios. Por eso, discrecionalmente, anuncian un subsidio de 400 millones de pesos a pagar en cuotas al estado echando mano a los fondos de nuestra obra social.
Históricamente el IOMA ha sido utilizado como caja para desvíos de fondos de los afiliados, en un verdadero campo de disputa con los capitales del negocio de la salud con sobreprecios sobre el costo real que se traduce en cortes de prestaciones para lograrlos, sobre un sistema de salud que debería ser universal.
El ministro de salud reconoce negociaciones con la entidades gremiales empresarias como FECLIBA, ACLIBA 1 Y 2, CEMIBO y AMP desde mayo de 2019, por lo que llaman la sustentabilidad de las clínicas basadas en tres pilares: una recomposición de ingreso del 7% sobre el 35% por la inflación en el 2019, acuerdos con los llamados módulos con el PAMI y el Ministerio de nacional de salud, para que tuvieran el mismo precio, y ahora, los subsidios para insumos y salarios, dado que estos 192 establecimientos estarían perdiendo finanzas y sustentabilidad económica debido a que según el gobernador los afiliados estamos yendo menos a las clínicas para consultas!!
Sabemos que en la Argentina hubo un proceso de gran concentración económica, y trasnacionalización de poderosas corrientes financieras que fugan capitales y especulan con la quiebra de empresas, usando los fondos del estado, y los títulos de la deuda externa. Esto ocurrió y ocurre en el agro, la pequeña y mediana industria y la salud, que no no son ajenas a este proceso económico.
El gobierno debe respetar y transparentar quienes están detrás de estos 192 establecimientos, y preocuparse por el estado en que han dejado todos los gobiernos al sistema público de salud, con bajos ingresos y precariedad común al sistema de clínicas privadas. La gestión política del IOMA retrasa, cuando no niega recursos, financiados por mas de 50 mil millones de pesos según el presupuesto de 2019, superior al mismísimo ministerio de salud provincial.
No es como dice el Ministro de salud Daniel Gollán, que dejarán afuera a los actores empresarios de salud con ganancias extraordinarias, sino que dejan a fuera a los trabajadores, que como los docentes, auxiliares y la administración pública sustentan al IOMA, una obra social millonaria. Este proceso de financiamiento de los trabajadores, forma parte de una verdadera política de extracción como la que ocurre en el IOMA, el IPS, el ANSES y el impuesto al salario, mal llamado ganancias, como el impuesto al valor agregado, mientras la renta agraria y las finanzas no son afectadas por políticas impositivas como se necesita.
Necesitamos un verdadero sistema único de salud que termine con los negociados de las clínicas privadas, los laboratorios y las prestadoras de insumos para someterlos a la necesidad planificada de los trabajadores.
Para esto el IOMA debe ser administrado por sus afiliados.
El FGDB y el SUTEBA debe denunciar esta situación y elaborar un plan de lucha para defender los fondos del IOMA.
CONSEJO EJECUTIVO SECCIONAL
SUTEBA MATANZA
Conducción Multicolor