El hecho sucedió en Virrey del Pino y, mientras las autoridades policiales intentan localizar a los autores materiales del asesinato, detuvieron a Cristal Del Valle Gonzáles quien los habría ayudado a escapar.
Por Tomás Modini
@ModiniTomas
La reconstrucción del trágico hecho
Para poner bien en contexto la situación es necesario realizar un vistazo atrás y recapitular sobre lo sucedido. El hecho en cuestión sucedió la semana pasada y una adolescente de 13 años, Jennifer Campos Calle, fue asesinada de un disparo en el tórax durante un intento de robo.
Fue a su padre a quien quisieron robarle en las intersecciones de las calles Machado y Concordia, en la localidad de Virrey del Pino. Contaron testigos en la reconstrucción hecha por las autoridades policiales correspondientes que cuatro delincuentes armados llegaron a la vivienda en un Peugeot 208, decididos a interceptar la casa.
Fue así que ingresaron hasta un lugar del hogar donde se encuentran algunos materiales para la construcción que son utilizados por personas que residen allí. Con las armas que llevaban en su poder, los asaltantes redujeron al matrimonio que entregaron algo de dinero y a su hija que, al parecer quiso defender a su padre mientras le pedían más plata, y terminó recibiendo un disparo en el tórax que fue letal.
Los autores materiales del crimen se fugaron inmediatamente en el mismo vehículo en el que arribaron y, hasta el día de hoy, no se sabe de su paradero. En cambio, padre e hija fueron trasladados al hospital Simplemente Evita de González Catán y la menor de edad no logró sobrevivir al impacto. El hombre fue asistido por algunas lesiones leves.
La detención por encubrimiento
Casi una semana después del lamentable episodio, fue detenida una mujer de 36 años identificada con el nombre de Cristal Del Valle González por un supuesto encubrimiento para con los agresores y posteriores asesinos.
El proceso de detención estuvo a cargo del fiscal Marías Folino, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática de Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza. La carátula marca que la arrestada está imputada por los delitos de “encubrimiento agravado” y “tenencia ilegal de arma de guerra”, tal como contó la agencia de noticias Telam.
La investigación tomó su curso y la recopilación de pruebas dio con la persona mencionada, de la cual se recolectó una cantidad de material lo suficientemente potable como para garantizar que colaboró con la fuga de los autores y coautores del crimen hacia la chica de 13 años.
De todos modos, no prestó declaración con la justicia por lo que continuará detenida mientras se intenta hallar a los agresores. A través de las cámaras de seguridad de la zona, se logró identificar la patente y el ingreso del auto a una zona descampada de La Matanza. Al mismo tiempo, se supo que el mismo vehículo tenía un pedido de secuestro activo por robo agravado y que además fue utilizado en otros nueve hechos delictivos bajo la modalidad entradera.
El desgarrador relato de la familia
Días después del asalto, el padre de la víctima dialogó con Crónica TV y expresó unas palabras más que sentidas: “La encontré boca abajo, apenas respiraba. Pensé que era el efecto del gas pimienta. Traté de contenerla, le toqué la espalda, la cabeza. ´Tranquila, tranquila, ya pasó, ya está ́, le dije, pero no me respondió. Atiné a darla vuelta y vi un charco de sangre, me embarré la mano. A partir de ahí ya está, nos volvimos locos, perdimos la calma”.
“Inmediatamente me alejé de lo que pasó y perdí los detalles. Solo me enfoqué en salvar la vida de mi hija que lamentablemente no se pudo. Me subí a la moto, vino un vecino, la subió atrás como si fuera un pasajero, él subió como un tercer pasajero y la llevamos dos cuadras. Mi mujer está abatida”, cerró.
Se verá que sucede con el correr de los días y si las pericias avanzar para encontrar a los asesinos de Jennifer y darle la justicia que se merece, tanto a ella como a su familia que perdió todo.
