
Diario NCO dialogó con una de las fundadoras de la organización, Tamara Rosenberg, para conocer más detalles acerca de la historia y el trabajo de la entidad.

A lo largo de los años, la Argentina atravesó y aún hoy enfrenta diversas problemáticas cuyos principales afectados resultan los sectores más vulnerables de la sociedad.
En ese sentido, resulta fundamental la labor de los diversos actores sociales que llevan adelante proyectos e iniciativas que apuntan a transformar la realidad social de la población.
En ese contexto, Diario NCO dialogó con una de las fundadoras de la Fundación La Alameda, Tamara Rosenberg, para conocer más detalles de esta organización que este año cumple 20 años de existencia.
Implicancias del aniversario
En lo que respecta al significado de estas dos décadas de labor, la referente de La Alameda manifestó: “En principio vivimos este veinte aniversario con orgullo y con tranquilidad porque sabemos que siempre estuvimos del lado del que lo necesita”.
En sintonía con lo planteado, la entrevistada amplió y subrayó que “siempre nos mantuvimos firmes en nuestros principios, en nuestros valores y acompañando las luchas de los trabajadores esclavizados, de la gente que necesita comer y también de aquellos que necesitan un lugar en algún momento y ayudamos a que lo consigan”.
“Esto lo hacemos a nivel federal desde hace algunos años y tenemos compañeros en diferentes provincias que vienen replicando el trabajo que desde la sede central de La Alameda, que es la que se inició hace 20 años, comenzamos”, comentó y destacó una de las fundadoras de la organización sin fines de lucro.
El surgimiento
Por otra parte, la entrevistada recordó cómo tuvo lugar el comienzo de la organización y así relató que “a crear La Alameda lo que nos impulsó fue la necesidad de los vecinos, en principio del barrio en donde funcionaba nuestra Asamblea Popular que es el barrio de Parque Avellaneda”.
“Lo que queríamos era dar alguna respuesta concreta desde la Asamblea a quienes más lo necesitaban. En ese momento, estamos hablando de abril, mayo de 2002, se llevaba adelante una olla popular en la esquina del parque que es justamente el que está frente a la sede de La Alameda”.
“Nosotros empezamos a buscar espacio para poner un comedor y estaba este espacio y decidimos que esta iba a ser nuestra casa; así la arreglamos y después vino un proyecto de ley, se expropió nos lo vetaron y nuevamente se volvió a votar la expropiación”, explicó y detalló la referente de la organización.
Dos décadas de labor comunitaria
Mientras tanto y ligado a la manera como comenzaron a llevar adelante acciones contra la explotación laboral, en principio hasta llegar a la explotación sexual y la trata de personas, la entrevistada dio una serie de precisiones.
Al respecto, la activista comentó: “Mucha de la gente que llegaba a al comedor eran mamás con hijos que habían venido de Bolivia y que las habían engañado con la promesa de buenos trabajos en el rubro textil”
Sin embargo, la referente de la Fundación denunció que “resultó ser que ahí es donde empezamos a descubrir toda esta cuestión de la explotación laboral en principio en los talleres de costura”.
“Después, una vez que empezamos a visibilizar esta cuestión, empezamos a recibir denuncias de otros rubros de la economía, como el trabajo rural, la explotación sexual, entre otras y en esa época no había ley de trata, que hablaba de estos temas”, indicó la entrevistada.
En ese sentido y para finalizar, Rosenberg reflexionó y remarcó que “el trabajo esclavo, explotación y la trata estaba invisibilizada y nosotros tomamos el tema que se nos impuso territorialmente”.
En la edición de mañana del Diario NCO se publicará la segunda parte de la entrevista con una de las fundadoras de la Fundación La Alameda, Tamara Rosenberg, para profundizar más acerca de la labor de la organización en el marco de su vigésimo aniversario.
Fuente fotografía: facebook.com y nueva-ciudad.com.ar
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