Isidro Casanova.- La comunidad de profesionales y trabajadores del nosocomio lo venían pidiendo desde hace un año. El reclamo se inició tras la muerte de una enfermera, que fue atropellada cuando cruzaba la ruta 3. Ahora esperan que se construya una dársena para el giro y que se aumente el señalamiento.
A poco de cumplirse un año de la muerte de Francisca Santillán, la enfermera que murió tras ser embestida por un auto cuando cruzaba la ruta 3, frente al Hospital Diego Paroissien, se colocaron los reductores de seguridad en ese sector.
La medida fue exigida por los profesionales médicos y trabajadores de ese nosocomio, que comenzaron a instalar la problemática del tránsito en la zona, que ponían en peligro no solo a los trabajadores del hospital, sino también a los pacientes que llegan al nosocomio, a los alumnos de las siete escuelas aledañas que deben cruzar la ruta 3 diariamente.
“Finalmente pusieron los reductores de velocidad en la ruta 3 frente al hospital. Hace casi un año que venimos bregando por esto, la dársena para el giro y el señalamiento. Lo bueno es que hayan empezado por los reductores que era lo más resistido por los funcionarios. Vialidad Nacional empezó a cumplir. Agradecemos y confiamos en que seguirán con lo faltante”, informó Reynaldo Saccone, titular la Asociación de Profesionales de la Salud del Paroissien.
El médico también resaltó “la constancia del grupo integrado por administrativos, enfermeros y profesionales e incluso el padre capellán que sostuvo pacientemente los reclamos, las actividades para hacer conocer las necesidades y las gestiones ante las reparticiones públicas pertinentes”.
Francisca Santillán murió la madrugada del 3 de junio de 2011, cuando se disponí a cruzar la Ruta Nacional Nº 3 a la altura del kilómetro 21 para ingresar al Hospital Paroissien para cumplir su turno en la Enfermería. Pero fue embestida mortalmente por un Mini Cooper que cruzó que no respetó el semáforo que se encontraba en rojo.
La víctima tenía problemas para caminar y sus colegas manifestaron que cruzaba la ruta con especial atención. Esa madrugada, bajó del colectivo y esperó el semáforo y fue embestida. Falleció en el acto.
En un acto homenaje, Saccone a Francisca. “Fue una compañera, como tantas enfermeras de este y otro hospitales, dedicó su vida a su vocación, el cuidado de la gente. Lamentablemente, la atropelló un auto que no respetó el semáforo y, como tenemos algunas compañeras que, en ocasión de entrar o salir han sido atropelladas, también, así que queremos recordarla y llamar la atención de las autoridades, porque esto es absolutamente previsible”, dijo.
El principal problema de transito en ese sector, es la falta de respeto de los conductores a las normativas de transito indicadas en la ley para las cercanías de escuelas y hospitales, sobre todo por las noches. Lo que convierte en extremadamente peligroso el cruce de la arteria y el ingreso al hospital.
La infracción más recurrente es la falta de respeto por el semáforo, y la muerte de Francisca no fue la primera. Además, el puente peatonal es poco utilizado, debido a que está ubicado a una cuadra de la parada de colectivos.
Otra problemática es la inseguridad, ya que muchos automovilistas no respetan el semáforo para no frenar en los semáforos, y por el mismo motivo los transeúntes evitan el puente peatonal.
Más allá de la colocación de los reductores de velocidad, el reclamo sigue. La comunidad del nosocomio exige la colocación de una dársena para el giro de izquierda y mayor señalización.
“No bajemos la guardia y pensemos que todavía falta para lograr que se cumpla la ley de Vialidad y se ponga la señalización reglamentaria y la dársena para el giro”, manifestó Saccone.
El médico también manifestó que “hubo concejales que nos brindaron su apoyo; hubo funcionarios municipales que colaboraron y agentes de Vialidad Nacional que escucharon y tomaron medidas favorables. Hubo gente que nos acompañó como las Madres del Dolor”.