
El reconocido dirigente gremial, Carlos Gdansky, extitular de la CGT Regional La Matanza, en diálogo de Diario NCO, se refirió a la situación de la coyuntura política y sindical y entre otros conceptos, señaló la necesidad de trabajar por la unidad del peronismo y del movimiento obrero. En ese sentido, especuló que para que ello se concrete, muchos tienen que dejar de lado intereses personales y priorizar lo colectivo.
Diario NCO: -Carlos, ¿qué análisis hace de la actualidad en el aspecto político y gremial?
Carlos Gdansky: -La verdad es que estamos viviendo una situación sumamente difícil. Arrancando por el plano político, gremial, económico, social y cultural que hay hoy en el país. Y me apena decir que estamos en un momento desastroso. La gente está muy mal y parece que estamos en dos mundos distintos. Por un lado los medios de comunicación oficialistas pintando un panorama donde las políticas del gobierno aparecen como excelentes, de la mano del Fondo Monetario Internacional. Y por el otro, el mundo real de la Argentina, que son las movilizaciones, las permanentes protestas, los comedores en las escuelas… ¡Todo esto es un escándalo!
NCO: -¿Se puede trazar un paralelo con los sucedido en 2001?
CG: -La diferenciación que se plantea respecto al 2001, es que no nos tenemos que olvidar que esto todavía no estalló porque ahora hay planes sociales y antes no los había. Se implementaron luego y gracias a ello, esto todavía está resistiendo. En términos personales considero que cosas como estas nunca las habíamos vivido. La diferencia está en que en otros momentos siempre había una luz de esperanza a la que uno se podía aferrar para salir. Pero ahora estamos con una incertidumbre terrible y cada decisión del Gobierno nacional, fundamentalmente en el plano económico, me hace ser muy pesimista de hasta cuándo se va a resistir. Lo lamentable es que el resultado de todo esto será que vamos a dejar a generaciones enteras con la dificultad de no saber cómo van a hacer para salir de este problema. Les va a resultar prácticamente imposible, porque se está terminando con la educación, la salud, la seguridad, los jubilados, los discapacitados… Se está terminando con todo. Este gobierno no tiene piedad de nadie…
NCO: -Si este modelo se sigue profundizando, ¿cree que estamos en peligro de que haya un estallido social?
CG: -No me gustaría para nada que eso sucediera, a nadie nos gusta que pueda llegar a ocurrir eso porque sería un doble retroceso. Por eso considero que es muy importante que el gobierno pueda terminar su mandato y que lo saquemos del poder a través de las urnas, en una gran unidad de todo el campo popular que está en contra de estas políticas y que somos la gran mayoría. Pero la verdad es que no sé cuánto va a resistir esta situación… Si ponemos como ejemplo un salario promedio de 20 o 25 mil pesos, habría que preguntarle al gobierno cómo hace una familia tipo para resistir el precio que tienen las tarifas y con un kilo de pan a 90 pesos… ¡Y estamos hablando de un kilo de pan!
NCO: -En términos políticos, si se logra consensuar la unidad del movimiento obrero, ¿usted cree que se puede llegar a potenciar una eventual unidad del peronismo?
CG: -Me parece que más tarde que nunca la unidad del movimiento obrero se va a dar. La dificultad que tenemos es el interés político partidario de cada uno de los dirigentes que se oponen a que haya unidad. Porque así como hay una gran mayoría que quiere que se produzca, hay una minoría que busca la forma para que esto no ocurra. Y eso se debe al interés político particular de estar ellos en los cargos y en los puestos que añoran. Esta es una sociedad distinta, pero igual soy optimista que esa unidad en algún momento se va dar y lo mismo va a suceder con el peronismo y con el campo popular, que también tiene una magnífica oportunidad de unificación. Aunque no vayan juntos en una primera elección, con el PJ por un lado y Unidad Ciudadana por el otro. No interesa. Lo importante sería que respetaran lo que significa un acuerdo con todo el campo popular, irían a una elección y el que tenga la posibilidad de acceder a una balotaje, todos los demás se tendrían que comprometer a acompañarlo. Sea quien fuera. La cosa no pasa por una cuestión meramente electoral, sino sobre qué proyecto de país queremos para la mayoría de los argentinos.
NCO: -Para terminar Carlos… Muchos dirigentes, en especial del sector sindical, se quejan porque no visibilizan una conducción clara, tanto en lo político como en lo gremial… ¿Usted coincide con ese concepto?
CG: -Por supuesto que estoy de acuerdo. Si no estaríamos todos unificados. Si hubiera un conductor que representara al conjunto del peronismo y del movimiento obrero, estaríamos todos juntos. Y como esto no ocurre, hay que resolverlo en una elección y hay que hacerlo con toda la responsabilidad que le cabe al peronismo, porque hoy el peronismo tiene mayor responsabilidad de la que tiene el propio gobierno, porque el gobierno todos sabemos para qué lado va y lo único que le queda a la gente para volver a recuperar la dignidad, algo de lo que más nos ocupamos los trabajadores, es el peronismo. No tiene vuelta.