
La fábrica de pastas explicó, a través de su página oficial de Facebook, cuáles fueron los motivos que justificaron la cesantía de Scavone, el hombre de 62 años que ayudaba a comedores comunitarios con productos de la empresa.
Redacción de Diario NCO
Desde Villa D´agri SRL aclararon por qué Osvaldo Scavone fue echado de las instalaciones luego de haber trabajado durante seis años. Señalaron, además, que nada tuvo que ver la acción solidaria que el hombre de 62 años llevaba adelante.
Aquí el comunicado:
“Villa D´Agri es una empresa familiar de San Justo, La Matanza, que da trabajo a 281 personas, con una antigüedad laboral promedio de 15 años y con empleados que los acompañan desde la fundación de la empresa hace 38 años.
Producimos 1.800 toneladas de pastas al mes de 15 tipos de productos diferentes de marcas propias y presentaciones para clientes, con una capacidad elaboración de 9.500 kg de pastas por hora.
Comercializamos nuestros productos a más de 200 clientes, con abastecimiento a todo el país. Exportamos el 17% de la producción a mercados como Brasil, Chile, Uruguay, Paraguay, Colombia, Perú, Estados Unidos, Inglaterra y Arabia Saudita.
Cumplimos con normas de calidad y certificaciones para el manejo y exportación de alimentos. Tenemos cuatro auditorías al año sobre responsabilidad social y certificaciones de calidad.
Realizamos donaciones de pastas a más de 50 comedores comunitarios, merenderos e instituciones del partido de La Matanza. En cada donación aseguramos las condiciones de entrega, manipulación e inocuidad de los alimentos.
La semana pasada debimos desvincular a un empleado por haber incumplido el reglamento interno y violado los acuerdos de confidencialidad.
En ningún punto del reglamento se establece la prohibición de actividades solidarias y/o donaciones por parte de los trabajadores.
El reglamento interno es visto por la comisión interna de los trabajadores de la empresa y firmado por los trabajadores y es parte de los procedimientos y normas de la compañía dentro del sistema de calidad. El reglamento fue actualizado por última vez y notificado nuevamente a cada trabajador en junio de este año.
Para una empresa familiar, que compite con grandes multinacionales, el cumplimiento estricto de los procesos es fundamental. Lamentablemente, el empleado cometió una falta grave que obligó a la empresa a tomar esta decisión.
La empresa procedió al cese de la relación laboral y al pago en tiempo y forma de la liquidación final del empleado desvinculado conforme a las normas vigentes.
Villa D’agri ya se contactó con el comedor Rayito de Luz y se comprometió con la donación de alimentos, así mismo continuará con sus donaciones mensuales a las diferentes instituciones locales y continúa trabajando con sus 281 colaboradores para producir alimentos de calidad para las familias”.