Decenas de miles de personas colmaron hoy la plaza Tahrir de El Cairo para lo que activistas describieron como la mayor manifestación en exigencia de la renuncia inmediata de la gobernante Junta militar desde la caída del ex presidente Honsi Mubarak, a principios de año.
También este viernes, la televisión estatal egipcia informó que la Junta encargó a un ex primer ministro de Mubarak encabezar el nuevo gobierno, luego de la renuncia de esta semana del anterior Ejecutivo tras cinco días de protestas y represión que dejaron más 40 muertos y 2000 heridos.
La TV dijo que Kamal el-Ganzouri, de 78 años y premier de Mubarak en la década de 1990, recibió el encargo anoche durante una reunión con el jefe de la Junta, el mariscal de campo Hussein Tantawi, pero la información no fue confirmada oficialmente.
La noticia de la designación de el-Ganzouri molestó aún más a los manifestantes de la plaza Tahrir, que ya están indignados por lo que perciben como renuencia de la Junta a desmantelar el legado político de los casi 30 años de gobierno autocrático de Mubarak.
“No sólo fue primer ministro de Mubarak, sino también parte del viejo régimen durante 18 años. ¿Para qué hicimos una revolución entonces?, dijo enfurecido el joven Mohammed el-Fayoumi, de 29 años, en la plaza Tahrir, citado por la cadena de noticias CNN.
Más temprano, y en medio de crecientes presiones sobre el gobernante Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, Estados Unidos endureció su postura ante la Junta militar y llamó a los generales a traspasar rápidamente el poder a una administración civil.
“El traspaso pleno de poder a un gobierno civil se tiene que realizar de manera justa e inclusiva, que responda a las legítimas aspiraciones del pueblo, tan pronto como sea posible”, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
“Estados Unidos cree firmemente que un nuevo gobierno egipcio tiene que tener poder con autoridad real de forma inmediata”, agregó el parte estadounidense, citado por la agencia de noticias DPA.
Los manifestantes que volvieron a llenar hoy la plaza Tahrir reanudaron su ya clásico canto de “Váyanse, váyanse”, en alusión a los gobernantes militares, que asumieron el poder tras la caída de Mubarak, en febrero, para liderar un proceso de transición que para muchos se hizo demasiado lento.
La protesta de hoy fue bautizada como “La Ultima Oportunidad de la Protesta del Millón de Personas”, y llega un día después de que la Junta pidiera perdón por las muertes durante la represión de las manifestaciones iniciadas el viernes, pero reafirmara que no piensa renunciar sin completar su misión de liderar la transición.
Los organizadores de la protesta dijeron que fue la mayor manifestación contra la Junta desde el comienzo de las actuales protestas e incluso desde el derrocamiento de Mubarak.
La Junta también descartó ayer un aplazamiento de las elecciones parlamentarias que comienzan el lunes.
Bajo presión popular, el mariscal Tantawi dijo esta semana que las elecciones presidenciales se celebrarán antes de junio próximo, y no a fines de 2012 o principios de 2013 como había dicho inicialmente.
En tanto, la fiscalía general informó que va a investigar las denuncias de que la policía encargada de mantener el orden empleó una mezcla de gas venenoso contra los manifestantes.
Para ello, según fuentes de los círculos de justicia, se han recogido granadas de gas lacrimógeno de los depósitos de la policía, así como los restos de estos proyectiles en la calle.
El Ministerio de Salud dijo hoy que los muertos en las protestas de los últimos días fueron al menos 41, y que 36 de ellos fallecieron en El Cairo. También hubo protestas en Alejandría y otras ciudades.
Los manifestantes aseguran que seguirán en la plaza Tahrir hasta que la Junta renuncie, en una muestra de determinación que recuerda la de las marchas que terminaron con el derribo de Mubarak.
Unos 5.000 partidarios de la Junta realizaron hoy su propia marcha de apoyo a los generales en el barrio capitalino de Abbassiyah, varios kilómetros al norte de la plaza Tahrir, no lejos del Ministerio de Defensa.
Los manifestantes de la plaza Tahrir, por su parte, recibieron hoy el apoyo del Gran Imán de la mezquita de Al Azhar, la mayor institución teológica del mundo sunnita.
“El Gran Imán los apoya y reza por vuestra victoria”, dijo hoy a los manifestantes en la plaza un enviado del religioso, Ahmed al Tayeb, que es designado por el presidente de la República, informó la agencia de noticias ANSA.