Villa Madero
Una mujer y su amante llegaban a su casa, donde el marido, un policía, los recibió con una balacera. Ella recibió un disparo; él, cinco. Malherido intentó huir en su auto, pero a los pocos metros chocó y se introdujo en un kiosco. Los vecinos están conmocionados. El efectivo policial quedó detenido.
Nora Adámoli
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El hecho se desencadenó en la mañana de este lunes en una vivienda ubicada en la calle Caaguazú y Cabildo, de Villa Madero. Por este episodio quedó detenido el agresor, quien tras dispararle a su víctima se dirigió a la comisaría de la zona y se entregó.
“Estaban separados de hecho, pero aparentemente el hombre tenía intenciones de regresar a su casa y retomar la relación que los unía”, dijo el jefe policial. Ante esta situación, el hombre enfureció, extrajo un arma de fuego y le disparó al joven que se hallaba con su ex mujer, a quien hirió de un tiro en el estómago.
Según mencionaron, todo comenzó con una discusión de pareja, momento en el que su esposa y el amante se encontraban dentro del auto estacionado en la calle Cabildo. Posteriormente, el marido, furioso, provocó una lluvia de balas. Así, hirió gravemente al joven, que se encontraba en el asiento del conductor.
Al ver la situación, trataron de escapar de esta balacera, pero a los pocos metros se incrustaron en la vidriera de un kiosco. Cabe destacar que el amante recibió cinco disparos, con lo cual no pudo controlar el vehículo. De todos modos, pudieron salir del auto por sus propios medios y fueron socorridos por los vecinos.
De acuerdo a lo que se pudo saber, fueron ellos mismos quienes lo trasladaron al hospital Santojanni, donde permanece internado aunque, presuntamente, fuera de peligro.
Asimismo, una de las vecinas mencionó que ambos se encontraban conscientes. “Él estaba muy herido pero entendía todo y la mujer estaba lastimada por los pedazos de vidrio que le cayeron de la ventanilla”.
“No sabemos qué pasó realmente. Creemos que fue un problema de pareja, en donde ambos querían tener la razón. Ellos vivían hacía mucho en este barrio y habitualmente tenían discusiones, pero cosas comunes, nada grande. Jamás tuvieron problemas con los vecinos, así que es extraño”, resaltó la mujer, quien agregó que la pareja tiene dos hijos.
En tanto, el agresor huyó, pero luego se presentó ante la comisaría local y la policía secuestró el arma utilizada para cometer el hecho. El detenido permanece alojado en una dependencia de la zona a disposición del fiscal de turno de La Matanza.
