Un chofer de la línea 236 notó que un niño se descompuso dentro del colectivo y tuvo un gran gesto que se volvió viral a la altura del cementerio de Morón.
El pasado lunes hacia las 17:35 horas una señora se subió al interno número 320 de la línea 236, perteneciente a la empresa Línea 216 Sociedad Anónima de Transporte (SAT), en la estación de Morón junto a su hijo de aproximadamente 7 años, que padece de problemas respiratorios desde hace mucho tiempo.
Todo comenzó a la altura del Cementerio Municipal, ubicado en la esquina de las avenidas Eva Perón e Hipólito Yrigoyen, cuando la mujer tocó el timbre señalando que el niño se descompuso y se quería bajar para que el colectivero no se vea metido en ningún inconveniente.
Sin embargo, el chofer reveló que no tenía inconveniente en esperar debido a que, si se marchaba, ella no iba a poder viajar después. Pese a la insistencia de la madre, el colectivero detuvo su marcha y estacionó para que la criatura pudiera tomar un poco de aire.
Al ver que no mejoraba, el conductor, llamado Nacho, fue a comprarle un paf con aerocámara a una farmacia cercana que pagó de su bolsillo y lo hizo sentar en un lugar alto con ventanilla luego de que el nene volviera a respirar con normalidad. “Estuvo todo el viaje pendiente de él”, declaró uno de los testigos que compartió la publicación.
A su vez, el pasajero añadió: “Comencé a ver sus actitudes y no lo hizo por obligación, sino que desde que llegó a la parada hasta que terminó el recorrido no perdió su sonrisa y no se puso nervioso ni con la situación ni con el tránsito. Le pedí amablemente sacarle la foto para exaltar su buena acción”.
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“Tengo que reconocer que hoy Nacho fue el héroe del día. Dios quiera que haya más como él en el transporte público y en la vida, donde tanta gente solo mira para el costado”, finalizó el posteo de Facebook.
Fuente: ViviElOeste.
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