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Alfredo Daniel Noguera tenía 45 años, era mecánico y delincuentes le partieron el cráneo con una piedra para robarle esa suma de dinero.
La familia pide información para esclarecer el caso.
Morir por 7000 pesos. El valor de la vida para algunas personas es nulo y hoy una familla llora a un padre que fue asesinado, que venía de trabajar como todos los días y seres despreciables lo golpearon con una piedra hasta partirle el cráneo, producirle una dolorosa agonía de cinco días y una muerte inexplicable llena de saña y violencia.
Noguera salía de trabajar en un taller en Monte Grande y estaba en una parada muy transitada de colectivos en Camino de Cintura y Puente 12 cuando malvivientes lo interceptaron y cometieron el aberrante hecho. Luego quedó internado en terapia intensiva, con fractura de cráneo y muerte cerebral en el Hospital Alberto Balestrini hasta que luego de varios días de agonía finalmente falleció.
Selene, hija del hombre asaltado y asesinado dialogó con Crónica TV y contó detalles de lo sucedido: “Él la llamó a mi mamá dos veces y en una de esas comunicaciones le dice que lo hicieron mierda, empezó a hablar mal y es ahí que una chica agarra el celular, porque lo encontraron deambulando como perdido, producto del golpe”.
A su vez, su hija reveló que las lesiones que recibió su padre fueron producto de otras personas y puntualizó que “los estudios demostraron que los golpes los recibió de terceros porque solo tiene golpes en la cabeza. Mi papá era bueno, no le hacía nada a nadie, él venía de trabajar. Capaz lo tenían marcado porque estos últimos días estaba viajando en colectivo”.
Más detalles de lo sucedido
Por el horario en que ocurrió, que fue cerca de la siete de la tarde de un día viernes, y el lugar en que aconteció, que es en la bajada de la autopista Richieri, se cree que mucha gente ha podido ver la situación, pero hasta el momento, por miedo o por desinterés, nadie se acercó para dar más precisiones sobre este asesinato.
Sobre lo que pasó después del asalto, la hija del hombre asesinado mencionó que “a mí papá lo llevó un patrullero hasta el hospital porque habían llamado a la ambulancia y nunca llegó y encima después lo hicieron esperar una hora para atenderlo”.
Además de la operación para salvarle la vida, aunque terminaría siendo infructuosa, los doctores tuvieron que extraerle la piedra que estaba dentro de la cabeza de Alfredo, lo que demuestra la saña y la violencia que tuvieron con el hombre hasta el punto de dejarle incrustado el elemento utilizado en el crimen.
No se resistió e igual lo mataron
Según palabras de su hija, Noguera siempre le dio la enseñanza a su familia de que antes que el dinero está la vida misma por delante, pero a pesar de ello el infortunio y la desgracia le sucedió. “Él siempre nos decía que si nos roban, que les demos todo y listo, así que no creo que se haya resistido al asalto. Lo material va y viene. Probablemente haya sido un asalto al azar”, rememoró su hija.
Según datos oficiales del Sistema Nacional de Información Criminal del Ministerio de Seguridad en el año 2018 hubo 2362 víctimas de homicidio en el país, lo que da un promedio de 5,3 casos por cada 100 mil habitantes. Hoy Alfredo es otra persona más que entra en esa lista, pero que no debe quedar impune, no debería ser un número más.
Por último, la joven pidió solidaridad a todas aquellas personas que hayan visto la secuencia del robo y posterior golpiza y concluyó que “esto ocurrió a las siete de tarde aproximadamente y es una zona transitada por lo que imaginamos que hubo testigos. Pedimos que si alguien vio algo se comunique con nosotros”.
Alfredo trabajaba de lunes a viernes como mecánico y lo mataron por 7000 pesos. Hoy una familia llora su ausencia y no encuentra respuestas en ningún lado. El caso está en ciernes, pero nadie aportó información para comenzar con la reconstrucción de este hecho luctuoso. La peor cara de la sociedad tiene forma de piedra.