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La Colmena: “hay mucho trabajo colectivo detrás de nuestra música”

La Colmena: “hay mucho trabajo colectivo detrás de nuestra música”.

Tamara Bregman, integrante del grupo, dialogó en una entrevista exclusiva para Diario NCO sobre sus orígenes, sus acontecimientos importantes, sus objetivos a futuro, su manera de organizarse y sus ideas políticas.

Se puede ver en las redes sociales del conjunto que tuvieron un 2019 lleno de acontecimientos importantes, y Bregman está de acuerdo. “Me parece que hubo varias cosas muy importantes y muy grandes. Lo primero fue tocar con Lila Downs en febrero. Eso fue posible porque el video de Zapata Se Queda que nosotras hicimos, por nuestro arreglo de la canción de ella y de Paul Cohen, se viralizó en redes y le llegó a ella”.

“Y se desenvolvió en poder compartir con ella la fecha con orquesta que se hizo acá en Buenos Aires, en un parque al aire libre, donde estaba también Café Tacuba. Después hacia mayo hicimos una gira a México, fueron 15 días de gira, hicimos entre 11 y 13 fechas y también talleres. Conocimos un montón de gente vinculada con la música de México”, contó la música respecto a lo que más la marcó de este 2019 de mucha actividad.

La artista anunció también que a fin de año pudieron grabar un videoclip nuevo que está por salir, y que es de un single que sacaron hace poco llamado Mal Bicho, un homenaje a Los Fabulosos Cadillacs.

La entrevistada reveló algo de lo que tienen planeado para el 2020. “Hay muchas ganas de seguir viajando, vamos a ver qué se arma, hay algunas puntas pero nada que podamos confirmar abiertamente aún. Después tenemos muchas ganas de hacer fechas por fuera de la ciudad de Buenos Aires y probablemente salga bastante material nuevo. Estamos en esa búsqueda”.

¿Cómo surgió el proyecto?

Bregman habló sobre los orígenes del conjunto. “Surgió después de unos talleres que hicimos en 2011, dirigidos en su momento por Luna Monti. Nosotras éramos sus alumnas del taller y cuando finalizó nosotras nos seguimos juntando a cantar, a compartir, a ver qué se armaba. Habíamos armado un espectáculo re lindo y teníamos ganas de seguir haciéndolo”.

La artista reconoció que finalmente nunca siguieron ese espectáculo, pero si continuaron cantando juntas, y muy lentamente empezaron a armar un nuevo repertorio propio. La música lo describió como un salto al vacío, dado que ellas eran solamente alumnas.

“Lo que hicimos primero fue armar pequeños grupitos porque éramos muchas personas, entonces era difícil juntarse todo el tiempo. La conclusión a la que llegamos es que lo más práctico era todo ese primer año de laburo, que no sabíamos cuánto iba a durar porque era un experimento, juntarnos en grupitos de a cuatro o cinco y empezar a armar arreglos a ver qué salía”, relató la entrevistada.

Y agregó: “Así empezó, todo el primer año fue así y ya el segundo año tuvimos la necesidad de vernos las caras entre todas una vez por semana y de que cambiara un poco la dinámica. Vernos una vez por mes entre todas no era suficiente así que hicimos ese gigante esfuerzo y desde ese momento logramos poner días de ensayos distintos, contemplando las posibilidades de cada una”.

Bregman advirtió que todo esto fue y sigue siendo “un laburo gigante”, pero que todas las integrantes del grupo le dan mucha importancia al encuentro grupal y que su norte es poder encontrarse siempre.

¿Por qué el nombre La Colmena?

“Creo que se define solo. La colmena son un montón de abejas trabajadoras. La colmena no tiene dirección vertical unilateral, es un proyecto que se sustenta con el trabajo de todas las personas que la llevan adelante”, dijo la artista sobre la forma que eligieron de identificarse como conjunto.

Y añadió sobre los valores del grupo: “La Colmena tiene como objetivo lo humano, priorizando eso antes que lo musical, y por sobretodo es un experimento de trabajo colectivo que venimos sosteniendo hace casi nueve años”.

La música evaluó que esta manera de pensarse funciona bastante bien para ellas por ahora, y si bien tienen sus altibajos, ellas sostienen este equipo y así fue como surgió el nombre de La Colmena, de esa necesidad de encontrar algo que identifique y resignifique el trabajo colectivo.

La relación entre un grupo de mujeres interpretando ritmos latinoamericanos y el feminismo

“En este sentido yo creo que hay varias aristas. Por un lado, nosotras esto de estar atravesadas por la lucha feminista es algo que empezamos a entender hace menos años de los que venimos laburando juntas”, explicó la entrevistada.

Y continuó: “En algún punto lo que sucedió fue que cuando empezamos a vernos atravesadas por el feminismo nos dimos cuenta de que veníamos sosteniendo hacía bastante tiempo muchas prácticas que después el feminismo reivindicó. Nos sucedió eso, empezamos a ponerle nombre a cosas que ya nos pasaban y ya veníamos haciendo”.

Bregman advirtió que esto no significa que sean avanzadas a sus colegas ni mucho menos, sino que lo dijo para destacar cuan enriquecedor fue para ellas saber que la sororidad y el trabajo colectivo eran algo que practicaban con sus compañeras desde hacía mucho tiempo. Esto también las ayudó a poner estas cosas en un lugar de aún mayor importancia.

La música y la ideología

“Cuando una le pone nombre a las cosas en general las jerarquiza bastante y eso me parece que fue fundamental, nos fortaleció y nos enriqueció un montón cuando empezamos a vincularnos con otras colectivas feministas”, manifestó la artista.

Y dijo que La Colmena no se considera una bandera del feminismo. “No porque no seamos feministas sino porque personalmente creo que hay muchas otras colectivas feministas que son mucho más representativas y reivindicativas. Somos una colectiva que busca y en su búsqueda intenta todo el tiempo ser feminista, pero creo que hay muchas otras voces para escuchar que son mucho más profundas en relación al planteo feminista que justo nosotras”.

A la entrevistada le parece que hay algo “indesligable” entre el ser mujer y el ser latinoamericana. Percibe a Latinoamérica como un lugar súper machista y cree que pensarse por fuera de su contexto no es realmente posible.

“La música y el feminismo fueron algo que apareció antes, pero que después pudimos empezar a ponerle nombre y a hacer que cobre mayor importancia. Y se nos volvieron indiscutiblemente inseparables. La relación o la coherencia entre las dos cosas viene como paso posterior más que como paso previo”, comunicó Bregman.

La artista también aseguró que “no hubo una decisión a priori en la que dijimos: ‘Vamos a hacer esto y nuestro proyecto va a ser feminista y latinoamericanista’. Sucedió y con el tiempo decidimos sostenerlo de esa manera”.

¿Cómo desarrollan los procesos creativos siendo tantas?

La música afirmó que los procesos creativos tienen momentos. Como contó anteriormente, tuvieron un primer momento en el que armaban arreglos en grupos chicos. Ese era el momento creativo, y el momento grupal era más pragmático, resolutivo, para charlar cosas y poner en práctica todo lo que se había trabajado en los grupos pequeños.

“Tuvimos una instancia que fue la de dos personas juntándose a hacer un arreglo y una directora que después dirige ese arreglo, y ahora estamos con ganas de volver al paso previo, de volver a la grupalidad y a la creación colectiva”, continuó la entrevistada.

Y confesó que “estamos laburando para que eso suceda porque también eso enriquece mucho los arreglos, enriquece el sonido, no se anquilosan los roles, eso es algo súper importante para nosotras, que los roles no sean del todo fijos a menos que alguna así lo desee”.

Hace varios años que las integrantes del grupo trabajan en un taller llamado Herramientas Para la Creación Vocal Colectiva, que hacen para personas con o sin experiencia musical. Esto permite crear, a partir de lo lúdico y de dinámicas grupales, pequeñas composiciones colectivas.

“A partir de que creamos ese taller y lo empezamos a coordinar nos dimos cuenta de que también queríamos ir por ahí, que nos recontra divertía, que nos daba mucho placer y que teníamos muchas ganas de que eso también sucediera puertas adentro”, comentó Bregman sobre cómo eso influenció su proceso creativo.

La forma de organizarse como colmena

La artista comunicó: “En relación al proceso organizativo hay mucho trabajo de producción extra grupal, muchísimas comisiones laburando en simultáneo. Nos organizamos por comisiones e intentamos que no haya una cumpliendo un rol sino que sean varias, no dejar a ninguna sola con una tarea, y siempre que podemos se hace”.

Hay comisión de redes sociales, de producción de fechas, de convocatorias de nuevas integrantes, de arreglos, de organización de ensayos, en La Colmena tienen comisiones para todo. Y parece ser una forma de trabajo que da buenos resultados.

“Siempre nos replanteamos las cosas. Nosotras además del laburo en comisiones y del ensayo semanal tenemos instancias de reunión tres veces al año obligatoriamente, que son la reunión de principio de año, la de mitad de año y la reunión de fin de año”, explicó la música.

Y señaló que a fin de año “planteamos objetivos, propuestas, si los objetivos anteriores se cumplieron, reviramos objetivos que fueron planteados pero no están funcionando, siempre están esas instancias”.

La entrevistada anunció que este año quieren comenzar a implementar el hábito de una reunión mensual, actualmente logran coordinarlo algunas veces. “No lo estamos pudiendo sostener todos los meses, pero lo vamos encarando”. Dice que esto nos sirve también para que el momento del ensayo grupal tenga más música y menos charla.

“Ese es el laburo que hay atrás, junto con la manager y la sonidista que son parte del staff, que cuando pueden vienen a las reuniones y también están en algunas instancias de encuentro”, concluyó Bregman.

 

 

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