Indignación por una docente que le niega la vacante a niña en riesgo
El caso que trascendió el último viernes ocurre en pleno centro de San Justo y tiene como protagonistas a una mujer golpeada madre de tres hijas que sufre violencia de género y la titular del jardín estatal N°971 ubicado en Jujuy 3231 de San Justo. Ocurrió cuando la mujer solicitó la incorporación de la menor de sus niñas a ese establecimiento y tras argumentar las especiales circunstancias que estaba viviendo, recibió como respuesta por parte de la directora un rotundo NO y un lapidario “todos tenemos problemas…”.
El día después del #Niunamenos
El caso es paradójico, porque ocurrió un día después de la marcha del #8M y la verdad es que deja muy mal parado al sistema educativo, que en vez de proteger y contener a una mujer que está padeciendo una coyuntura muy particular, deja a esta mamá y a sus hijas libradas a su suerte.
Es que oportunamente esta mujer, cansada de los golpes recibidos por su pareja, que no es más que el padre de sus tres criaturas, acudió a la Justicia y tras cumplimentarse en ese sentido en forma correcta todas las acciones, derivó luego en que el hombre trasgrediera el perímetro de protección a la víctima, por lo que fue detenido.
Pero el caso tiene otras aristas, ya que la familia del agresor, al enterarse que la mujer había hecho la denuncia y como consecuencia de ello luego fue apresado, agredió a la mujer al punto tal, que en una de las diligencias, la víctima debió ser retirada de la Fiscalía en un camión celular, porque ocho miembros de la familia del detenido la esperaban en la puerta para agredirla.
Pruebas al canto y como es de imaginar, aunque su pareja esté detenida y los hermanos de él tengan que cumplir con nuevos perímetros de protección fijados por la Fiscalía, la joven mujer está en peligro permanente y por decantación, sus hijas también.
Como las dos hijas mayores cursan el ciclo escolar en la Escuela N°1 “Mariano Moreno” y como la más pequeña, -con este panorama de conflictos, agresiones y violencia- debería concurrir al jardín de infantes para su educación inicial, fue que solicitó la inscripción en el establecimiento N°971, cercano al establecimiento educativo al que concurren sus hermanas mayores.
Circula acompañada
La mamá de esta niña cuenta como único ingreso la Asignación Universal por Hijo (AUH) correspondiente a sus hijas y alguna ayuda de su propia familia. Y a causa de este penoso presente, no puede circular tranquila por la calle porque su integridad física está en permanente peligro.
“La mamá le ofreció llevarle una nota (a la directora) que pensaba solicitar en la Fiscalía de Violencia de Género de La Matanza y la directora le respondió que ‘aunque lleve una orden de un juez’ ella no iba a modificar la lista de espera porque ‘yo soy transparente’ y seguidamente le manifestó que ella no quería que ningún padre le cuestionara que ingresaran chicos ‘por acomodo’” contó indignado uno de los testigos que presenció el hecho de marras.
Otro informante, visiblemente indignado y desconcertado ante la situación, expresó: “Otro dato es que la mamá salió llorando de la entrevista del jardín y le dijo a la directora ‘lo único que quiero es que usted como mujer comprenda mi situación…’. Pero la directora -insensible- la trató de manera soberbia, por lo que esta chica más que agredida se sintió denigrada. Los otros jardines que hay en San Justo están a varias cuadras de la Escuela 1 y lo que no tiene que hacer precisamente es andar paseando sola por la zona…”, manifestó.
Cabe consignar que la joven madre debe circular por la calle acompañada. Solo lleva a sus hijas a la escuela y rápidamente vuelve a refugios ocasionales, ante el temor de que la familia del agresor la ataque nuevamente a ella y eventualmente, a sus hijas, dado que al parecer, denunció en la Fiscalía que su pareja también agredió a alguna de sus criaturas.
Crédito: www.tres65.com
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