Juan Carlos Alderete, es presidente nacional del PTP (Partido del Trabajo y del Pueblo), fuerza que integra el Frente Popular que llevó como candidato a presidente en las últimas elecciones PASO al sindicalista Víctor De Gennaro y al propio Alderete como candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires. Recibió al NCO en su oficina de la llamada escuela amarilla, sede de la CCC de La Matanza en el barrio La Juanita de Gregorio de Laferrere.
Por: Emilio González Larrea
-¿Qué balance haces de este primer mes del gobierno de Macri?
Bueno, ya se vio por donde va. Ha tomado medidas no para favorecer a los trabajadores y al pueblo, por el contrario, sus medidas de gobierno han sido para seguir beneficiando a los mismos que lo venían haciendo con el gobierno anterior. Ha puesto dinero a los industriales, a las cerealeras, pero no a los pequeños y medianos productores que ya habían vendido la soja y la rebaja de las retenciones, al no ser diferenciadas, teniendo en cuenta quién es quién en el campo, beneficia a los pools y grandes cerealeras exportadoras de granos. A esto hay que sumarle las medidas que ha tomado contra los trabajadores que tienen contratos basuras en el Estado. Algunos pocos son privilegios de contratos políticos con sueldos de decenas de miles de pesos, pero muchos son de sueldos de alrededor de 5.000 pesos. Deberían asignarles tareas a esos trabajadores y no con esta excusa despedir a “troche y moche”.
-Si, con esta excusa de los ñoquis se han despedido cerca de 15.000 trabajadores del estado, nacional, provincial y municipal…
-Exactamente. Fue un acierto del PTP al hacer una evaluación en el mes de septiembre pasado que dijo que cualquiera de los tres que tenían posibilidades de llegar al gobierno nacional iban aplicar devaluación y ajuste y que era necesario prepararse para la pelea política y sindical contra esto. También asistimos a una gran disputa por quien hegemoniza el bloque de las clases dominantes y lo vemos últimamente en esto de los tres mafiosos que estaban prófugos y han agarrado después de 15 días de persecución. No está dicha la última palabra con el resultado de esta disputa. Claro que en esta disputa, siempre paga los platos rotos el pueblo.
El argumento permanente de este gobierno es que todo tiene que ver con la herencia del gobierno kirchnerista. ¿Cuál es tu reflexión?
-Si es cierto lo de la herencia que dejo el gobierno anterior. Pero no se pueden justificar con el argumento de la herencia, ya que ellos sabían lo que sucedía y denunciaban cómo se estaba manejando la economía y también en algunos negocios como en la Ciudad de Buenos Aires que eran socios con el kirchnerismo. Sus medidas durante este mes no han sido para revertir la política anterior, un claro ejemplo es la inflación con el levantamiento del cepo, la consiguiente devaluación han activado la disparada tremenda de los precios de la canasta alimentaria.
Hubo y hay un fuerte reclamo de un bono o adelanto a costa de futuros aumentos para ayudar a paliar esta situación a los jubilados, desocupados y trabajadores. Pero el gobierno ha hecho oído sordo a este reclamo.
–Sí, excepcionalmente en algunos lugares como en La Pampa, por ejemplo, que se ha logrado un bono de fin de año, con una clausula que el mismo no se descuente en los futuros aumentos que se logren en las paritarias. O en otros casos donde no se han quedado esperando que se los entregue el gobierno, independientemente de las expectativas que ha generado en algunos sectores y han peleado como ha sido en la provincia de Tucumán, donde los municipales lograron un bono de cuatro mil pesos a pagar en dos veces en los meses de enero y febrero. Donde han luchado les abrieron los oídos y la mano a los gobiernos. Este gobierno prometió en la campaña y habla de pobreza cero, pero no larga nada para los de abajo.
-La situación económica de los de abajo es complicada. Se calcula una canasta para una familia tipo de alrededor de 20.000 pesos; la mayoría de los jubilados gana 4300 y el gobierno les dio 400 como ayuda de fin de año, lo que representa un día para vivir o si vas a un supermercado no es una compra muy grande. En ese sentido va a ser un tiempo difícil el que se viene. ¿No te parece?
-Bueno. La politica de este gobierno en este mes ha favorecido a los poderosos de la economía y le ha sacado más del 30% de sus ingresos a los trabajadores, jubilados, desocupados y de los planes sociales, etc. Es un volumen muy grande de dinero. Por eso además de una ayuda extra es necesario una rápida convocatoria a paritarias abiertas para discutir salarios. Siempre se ha tomado como parámetro para definir los niveles salariales a los estatales y los docentes. Y cuando se inicien estas paritarias va haber luchas. Ya en los docentes como hacia el gobierno anterior no reconocen para negociar en las paritarias a las 9 seccionales del Suteba opositoras a la conducción de Baradel, el cual se disciplinaba al gobierno kirchnerista. Este gobierno también quiere conducciones gremiales claudicantes. Creo que vamos a un verano caliente. Las medidas del gobierno van ir agravando la situación de los sectores populares, piensan sacar el subsidio a la electricidad, al transporte público, se habla que el colectivo va a estar cerca de los 10 pesos, es decir se viene un tremendo tarifazo Y como la gente no quiere retroceder en las condiciones de vida, van haber luchas sociales, y para responder a ellas es que han sacado el protocolo de seguridad, para responder con la represión. Ya se vio esto en la Capital Federal con la represión en el hospital Borda, en el Indoamericano, en la toma de tierras en el asentamiento Papa Francisco y con los trabajadores de Cresta Roja y los municipales despedidos en La Plata.
Entiendo que vamos a un tiempo de conflictividad política, social y sindical. Nosotros como Frente Popular tenemos un programa y queremos hacer conocer al pueblo con nitidez nuestras propuestas para lograr realmente “la pobreza cero”, cosa que este gobierno ha prometido, pero deja en la calle miles de trabajadores no solo estatales sino en colusión con los monopolios en la industria privada como pasó en Siderca que intentaron despedir a 190 trabajadores y rebajarle el 60% del sueldo y esto fracaso por la lucha de los trabajadores metalúrgicos autoconvocados. Y es con esta perspectiva que vamos al segundo Congreso Nacional del Frente Popular para el mes de marzo y una tarea en la que estamos en su preparación es la discusión con otros sectores políticos del campo popular para ampliarlo, ya que con muchos tenemos coincidencias en las luchas y en algunas propuestas para resolver los problemas nacionales y populares.
