“Hay que volver a las fuentes”

La Tablada – Parte 1

Fue un Concejal que protagonizó inolvidables debates en el viejo recinto del HCD del Palacio Municipal. Radical hasta la médula, más allá de hayan dicho, a modo de elogio, que “Es el más peronistas de los radicales”.
José De Miguel, un radical matancero que dejó, casi en forma permanente, la militancia política pero que no puede ocultar su pasión por la política y por el radicalismo, donde milita desde hace 40 años. Hombre de La Tablada, dónde vive desde toda la vida, aún se lo puede encontrar por las tardes en el barcito jugando unos trucos con sus vecinos de siempre.
Alejado de la práctica activa de la política, refugiado en su familia y en su trabajo, “El Negro De Miguel” (como se lo conoce) hizo una pausa en sus actividades y dialogó en exclusiva con NCO, donde analizó la actualidad del radicalismo nacional, provincial y local.
Este reportaje es bastante sustancioso y no tiene desperdicio, es por eso que el mismo ha de salir en dos partes. Al finalizar con la charla, José De Miguel no pudo con su genio y le agradeció al medio por la nota y por haberlo distraído de sus actividades durante media hora.

José De Miguel afirma que “Desde la conducción nacional del radicalismo, encabezada por el Ing. Barletta, se ha propuesto que el radicalismo debe recuperar su vinculo con la sociedad, como primera instancia de acción política, por eso se va demorar establecer algún marco de alianzas políticas para el futuro. El radicalismo debe recuperar esta interrelación con la sociedad antes de pensar en otra cosa” y asegura que “Las últimas elecciones fueron un golpe para los radicales, por supuesto estábamos aquellos que advertíamos que esto iba a ocurrir y aquellos que alertábamos sobre esté final anunciado, porque se habían producido una enorme sucesión de errores en el manejo de la campaña y aún más, en el marco de la alianza que se hizo. Independientemente de no haber estado de acuerdo con todo esto, trabaje para la candidatura del Dr. Ricardo Alfonsín pero advertí que había una conjunción de errores, de decisiones que nos iban a conducir, sin ningún tipo de dudas, al fracaso. No había ninguna posibilidad, salvo el milagro, de que el resultado fuese otro”.
“El radicalismo matancero no es una isla, esta en concordancia con lo que ocurre a nivel nacional y provincial, se ha perdido el contacto con la gente” sostiene el dirigente radical y agrega que “Hay que volver a las fuentes, debemos volver a la esencia del radicalismo. Siempre se dijo, al modo de un caballito de batalla, que siempre había un en cada pueblo. Siempre se ha dicho que el radicalismo había perdurado y había persistido en el tiempo porque siempre había un radical en cada pueblo que mantenía encendida la llama del radicalismo. Me parece que tenemos que volver a eso”.
“Utilizando un slogan futbolero que dice que se juega como se vive, me parece que también se debe hacer política como se vive” admite José De Miguel y explica que “Uno debe hacer política sin buscar una reciprocidad inmediata por las cosas que se hacen. La política hay que hacerla con alegría. Hay veces que veo dirigentes con el gesto adusto, pero no hay cosa más linda que hacer lo que a uno le gusta, no hay nada que llene más el espíritu de uno que hacer algo que le gusta. La vida del militante es una cosa fantástica, porque llena el espíritu, te llena el alma, porque a uno lo llena de realizaciones y hay que hacerlo con alegría. Uno en política debe tratar de ser útil, esa es la función básica del militante político, ver de qué manera puede contribuir a la sociedad donde uno vive, a través del pensamiento y de los ideales, para ver de qué manera se solucionan los problemas y eso solo puede hacerse con alegría, pero no hay que hacerlo buscando la devolución inmediata, hay que hacerlo desinteresadamente, esa es la actitud del militante. Si realizó una acción en beneficio de la comunidad, no lo hago para que la sociedad me premiara, puede ser que después me premié”
“No podemos quedarnos en el facilismo, de mirar cruzados de brazos, esperando que al gobierno le vaya mal este año, que el ajuste realmente impacte en la sociedad argentina y que a partir de ahí, la sociedad cambie su pensamiento y automáticamente se pase a mi partido” afirma José De Miguel y añade que “No puede ser así, es un insulto al militante pensar eso, la actitud del militante debe ser un compromiso permanente con la gente aunque después eso no se traslade a los votos. Hay que buscar obstinadamente el voto. El voto se logra trabajando y gradualmente y, si en todo caso el voto no se consigue, le queda al militante la satisfacción y el orgullo de haber sido útil; esa actitud es hacer honor a la militancia”.