Seis soldados británicos murieron como consecuencia de un atentado con bomba al paso del vehículo acorazado en que viajaban por la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán, según informó un alto mando del Ejército de Reino Unido.
Este es el ataque que más víctimas mortales causó en las filas británicas en Afganistán desde 2006 y aumenta a 404 la cifra total de soldados de esa nacionalidad fallecidos desde 2001.
Los militares, cinco miembros del Tercer Batallón del Regimiento de Yorkshire y uno del Primer Batallón del Regimiento del Duque de Lancaster, participaban en una patrulla cuando se produjo la explosión, según el Ministerio de Defensa.
Mohamad Ismail Hotak, responsable de la Policía afgana en Helmand, precisó que lo que explotó fue “una bomba caminera”, el arma con la que los insurgentes están causando más muertes en Afganistán, informó la agencia de noticias Europa Press.
El ministro de Defensa británico, Philip Hammond, emitió un comunicado en el que condena el atentado y afirma que los responsables “no conseguirán que fracase una misión cuyo fin es proteger la seguridad nacional” de Reino Unido y “hacer progresos reales en la provincia de Helmand”.
“Gracias a los continuos esfuerzos de nuestras Fuerzas Armadas (…) estamos construyendo un Afganistán que podrá valerse por sí mismo cuando finalicen las operaciones de combate de Reino Unido, a fines de 2014”, aseguró.
En el país centroasiático hay unos 9.500 soldados británicos, un contingente que se irá reduciendo gradualmente a lo largo de los próximos años, de acuerdo al compromiso asumido por el Reino Unido