En la madrugada del 1° de diciembre se desató en el perímetro de la Corporación de Mercado Central un voraz incendio de pastos que puso en peligro las instalaciones de varios mayoristas.
El incendio, según pericias oficiales, fue intencional y comenzó en los terrenos que bordean las vías del ferrocarril que une Temperley – Haedo, para luego extenderse, por acción del viento y las altas temperaturas, hacia dentro del predio del Mercado Central.
El fuego puso en jaque a los Bomberos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (que tienen su cuartel dentro del Mercado Central) al cobrar fuerza y amenazar las instalaciones de una concesionaria de autos y camiones y al local de un importante mayorista. Las llamas también amenazaron una antena de telecomunicaciones, dado que de no haber sido controlado a tiempo, la pérdida de esa antena hubiese dejado incomunicado a gran parte del municipio.
Los Bomberos policiales, después de una ardua pelea, lograron dominar el fuego para luego extinguirlo.