Donde funcionaba el subdestacamento de la comisaría de Lomas del Mirador.
Nicolás Spalek.
Cuando uno entra al subdestacamento donde esta comprobado que Luciano Arruga estuvo detenido ilegalmente lo reciben un piso de madera desgastado, paredes ajadas pintadas de color distinto según el ambiente, cartones que reemplazan vidrios, un baño con cerámica sucia y un agujero que dejó la desinstalación de un aire acondicionado. Ese es el punto de partida, físicamente hablando, del Espacio para la memoria social y cultural Luciano Arruga.
Esta casa arruinada, ubicada en Comisario Jose Indart 106, estaba pensada en principio para que sea un centro de operaciones de la policía. En la práctica fue un punto donde Arruga fue detenido ilegalmente y asesinado. El miércoles por la mañana en un acto, el Intendente Fernando Espinoza inauguró el Espacio para la memoria social y cultural Luciano Arruga donde funcionaba ese destacamento.
Antes de revelar las placas conmemorativas, el miembro de la sucursal de La Matanza de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) Pablo Pimentel dio un pequeño discurso donde destacó el estar viviendo “un hecho histórico”. “Estamos formando parte de un acontecimiento histórico, por lo inédito. Es la primera vez que en democracia un funcionario cierra un lugar donde esta totalmente probado estuvo detenido, torturado a muerte Luciano Arruga. Es cerrado y transformado en un centro de memoria” resaltó el militante.
Aunque Pimentel agradeció al Intendente porque “ha tenido el coraje necesario”, criticó –al igual que Vanesa Orieta con dureza al Gobernador Daniel Scioli ya que considera que ha “ignorado” la causa del joven desaparecido a fines de enero del 2009.
A continuación, Orieta emitió un muy emotivo discurso donde tuvo la
voz quebrada fue una constante. “Logramos que este lugar se cierre. Esta lucha es de familiares, amigos y todas las organizaciones que nos acompañaron desde el primer momento” destacó.
Si bien considera la apertura del centro, un resultado de una lucha de 3 años, la joven advirtió que su reclamo continua: “Luciano no está, y eso es lo que nos sigue motorizando. Hasta que no aparezca ni los 8 policías involucrados en la causa estén detenidos, esto no se termina”.
Las palabras de Espinoza estuvieron marcadas por el pedido de disculpas. “Nunca hubiéramos pensado que al inaugurar este subdestacamento hoy lo íbamos a estar cerrándo y trasladándolo. La verdad me siento responsable como Intendente y como representante del Estado. Tendría que haber supervisado más lo que pasaba, por eso pido mil disculpas y me hago cargo”
Además se comprometió a hablar con Scioli por el destrato e ignoro que los familiares de Arruga aseguran haber pasado cuando reclamaron ante el mandamás de la provincia.
El Espacio para la memoria social y cultural Luciano Arruga pasará a formar parte de la esfera de la Dirección de Derechos Humanos. “va a ser una área de gestión derechos humanos del municipio. A través de esta dirección venimos marcando una nueva etapa en La Matanza, respecto de trabajo en conjunto con organizaciones que luchan por los derechos humanos” dijo Espinoza.
Luego de develar la placa y abrir oficialmente el espacio Orieta habló con medios zonales. Miró con buenos ojos las disculpas que el Intente le hizo a su familia, ya que “es aceptar que hubo una grave responsabilidad a la hora de inaugurar una comisaría sin hacer los controles debidos”.
Sin embargo no pudo darse totalmente por conformada. “Luciano sigue desaparecido. Y acá tiene que haber un compromiso de los sectores político y judicial para fortalecer la causa. Entiendo que es un Intendente y no es el que decide por el Gobernador, pero es parte de la gestión y tiene que hacerle llegar las inquietudes de su pueblo”.
