La Defensoría del Pueblo bonaerense destacó la importancia de fortalecer la atención integral durante el embarazo, el parto y el puerperio, y remarcó la necesidad de construir políticas públicas provinciales que reconozcan esta etapa como un asunto de salud y de derechos.
Por Florencia Belén Mogno
El puerperio constituye una de las etapas más críticas en la vida de las personas gestantes, tanto desde el punto de vista físico como emocional. Aun así, su impacto se mantuvo históricamente relegado en las políticas públicas y en los debates institucionales.
En la actualidad, organismos especializados señalaron la importancia de abordar esta etapa desde una perspectiva integral que contemple no solo la recuperación física, sino también el acompañamiento emocional y la construcción de redes de cuidado.
La invisibilización del puerperio tiene raíces culturales y sociales. Durante décadas, la atención pública se concentró casi exclusivamente en el momento del nacimiento y en el cuidado de la persona recién nacida.
Esa centralidad desplazó las necesidades de quienes cursan el posparto, lo que generó una brecha significativa entre la demanda real de apoyo y la oferta institucional disponible. Las transformaciones recientes en las agendas de género permitieron recuperar esta discusión y analizarla en relación con los derechos reproductivos y los modelos de crianza contemporáneos.
Dentro de este marco conceptual, la Defensoría del Pueblo bonaerense afirmó que resulta fundamental promover una comprensión más amplia del puerperio y de sus implicancias en la vida cotidiana.
Según el documento al que accedió Diario NCO, el organismo planteó que “es fundamental visibilizar y concientizar sobre el impacto del puerperio en la salud y vida cotidiana de las personas gestantes, promoviendo una atención integral y un acompañamiento adecuado”. La afirmación recuperó la necesidad de ubicar esta etapa en el centro de la agenda pública y sanitaria.
Una mirada interdisciplinaria para la etapa posparto
La Defensoría sostuvo que las expectativas sociales asignadas a las personas gestantes dificultaron durante mucho tiempo la posibilidad de comprender sus necesidades de manera singular.
El rol central que adquiere la persona recién nacida en los primeros días y semanas posparto suele desplazar los síntomas, las dificultades y los requerimientos de quienes transitan este proceso. Este escenario refuerza la urgencia de impulsar políticas que reconozcan la dimensión emocional, física y psicosocial del puerperio.
Asimismo, desde el organismo remarcaron que “muchas veces, los roles y expectativas sociales dificultan una escucha singular de las necesidades de las personas gestantes, sumado a la centralidad en la persona recién nacida”.
La frase sintetizó el diagnóstico actual: la salud integral no se garantiza únicamente mediante controles médicos, sino también mediante la creación de espacios de escucha, acompañamiento y cuidado.
La necesidad de un marco normativo específico
En línea con esta mirada, la Defensoría señaló que el reconocimiento del puerperio debe convertirse en un tema central dentro de los debates legislativos provinciales. El organismo planteó que resulta necesario construir un marco normativo que garantice derechos, defina responsabilidades institucionales y reconozca los saberes de quienes trabajan en la atención temprana de la crianza.
Según el reporte “la Defensoría del Pueblo resalta la importancia de reconocer al puerperio como tema específico en los debates legislativos y el desarrollo de un marco normativo provincial”.
En ese sentido, este planteo implicó impulsar políticas de salud integral que no se limiten al acompañamiento clínico, sino que integren dimensiones educativas, psicológicas y comunitarias.
Además, el organismo destacó que la construcción de un marco normativo permitiría ampliar la estructura de cuidados y fortalecer la intervención de equipos interdisciplinarios. La integración de nuevas disciplinas en la atención del puerperio constituiría un paso relevante para acompañar las necesidades reales de quienes atraviesan esta etapa, especialmente en contextos de vulnerabilidad social o donde la red de apoyo se encuentra fragilizada.
El rol de la puericultura en las políticas provinciales
En relación con los debates legislativos, uno de los ejes señalados por la Defensoría fue la necesidad de reconocer la tarea de la puericultura dentro del sistema de salud. El organismo subrayó que la provincia de Buenos Aires cuenta con proyectos de ley orientados a regular el ejercicio profesional de la disciplina y a consolidar su presencia como parte de los equipos de acompañamiento en la gestación y en la crianza temprana.
En los informes analizados se destacó que “los actuales proyectos de ley, a nivel provincial, buscan regular el ejercicio profesional de la puericultura, resaltando su rol como agentes de salud especializadas/os en lactancia y crianza”.
De esta manera, este reconocimiento permitiría fortalecer la atención desde la gestación hasta los primeros años de vida y dotar de mayor profesionalización a quienes desempeñan estas tareas.
El avance legislativo en esta materia también contribuiría a mejorar la respuesta institucional frente a las necesidades de las personas gestantes. La puericultura, entendida como una disciplina especializada, tiene la capacidad de brindar herramientas para la lactancia, el sueño infantil, la organización de rutinas y el acompañamiento emocional. Incorporarla dentro del sistema provincial permitiría articular políticas de cuidado más amplias y efectivas.
Hacia políticas integrales que acompañen el posparto
El análisis elaborado por la Defensoría del Pueblo bonaerense permite comprender que el puerperio constituye una etapa que exige un abordaje integral y sostenido. La construcción de marcos normativos, la incorporación de nuevas disciplinas, la producción de información y la promoción de espacios de acompañamiento representan pilares fundamentales para garantizar derechos y fortalecer las condiciones de salud de las personas gestantes.
Impulsar políticas públicas centradas en el bienestar durante el posparto contribuye también a reconocer la diversidad de experiencias y a fortalecer la red de cuidados en los primeros meses de vida.
El desafío consiste en avanzar hacia una institucionalidad que contemple la complejidad de esta etapa, que amplíe la formación profesional en torno a la crianza temprana y que asegure un acompañamiento respetuoso y continuo.
La Defensoría reiteró que el trabajo articulado con organismos de salud, legisladores y organizaciones comunitarias constituye un elemento clave para transformar la realidad del puerperio en la provincia.
Las acciones desarrolladas y los diagnósticos presentados buscan construir un escenario donde las necesidades de quienes atraviesan esta etapa reciban la atención que históricamente se les negó y donde la salud integral se convierta en un derecho plenamente garantizado.
Fuente fotografías: Defensoría del Pueblo bonaerense.
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