La concejal Ana María Barbetti, del espacio “Hacia la Libertad”, analizó su trabajo legislativo, la tensión entre la vieja política y las nuevas demandas sociales, y sostuvo que su mirada cambió al entrar en contacto directo con las urgencias del distrito. También destacó que uno de sus proyectos —vinculado a la incorporación de inteligencia artificial en educación— fue aprobado recientemente.
Por Giuliana Salmonte Siciliano
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Al comienzo, afirmó que su experiencia dentro del Concejo Deliberante modificó la percepción con la que había ingresado a la actividad política. Por eso, señaló que “un problema grande cultural en la gente”, pero que el verdadero cambio se produce cuando se toma contacto directo con la gestión pública diaria. “La realidad es otra acá en La Matanza y solo te das cuenta cuando entras en la gestión. Tenés que tener el corazón muy duro para sostener únicamente la bandera con la que entraste y no mirar la necesidad de la gente”, expresó.
Además, explicó que siempre tuvo una inclinación social, pero que su trabajo institucional la obligó a profundizarla: “Con la experiencia estando adentro, me di cuenta de que tengo una parte social que siempre la tuve como sensibilidad hacia ayudar a otras personas”.
En relación con las críticas constantes hacia la gestión municipal, Ana María sostuvo que existe una tendencia instalada a remarcar lo negativo, ignorando avances concretos. Como ejemplo, destacó la implementación de un proyecto sanitario vinculado a la atención de personas sin obra social, una iniciativa que, según aseguró, se relaciona con una propuesta que ella presentó al asumir. “La gente que no tiene cobertura puede atenderse en cualquier clínica privada ante una urgencia y el municipio se hace cargo. Ya está implementado y se está usando”, explicó.
También remarcó que parte de las resistencias forman parte de mecanismos propios de la vieja política, que siguen condicionando a sectores vulnerables mediante discursos repetidos y pesimistas. “Hay una vieja costumbre de repetir un speech de que todo está mal. Pero la gente que piensa, que empatiza, se da cuenta”, lanzó.
Con respecto a la reconfiguración del Concejo Deliberante, Ana María Barbetti confirmó que continuará en su bloque unipersonal, mientras que otro sector formará un bloque de cuatro concejales bajo la presidencia de Leila. “Respeto la posición de cada uno, lo que no me gusta es la impronta de la vieja política donde tenés que defenestrar a alguien para hacer política. Yo no voy con esa”, afirmó.
Los proyectos aprobados y su alcance educativo
El fragmento donde la concejal detalló que presentó 16 proyectos y que uno de ellos fue aprobado recientemente abre la puerta a comprender el enfoque de su labor legislativa y la proyección de ese trabajo en el territorio.
En primer lugar, la concejal destacó la iniciativa vinculada a la incorporación de inteligencia artificial en el sistema educativo local. El proyecto propone sumar contenidos y prácticas relacionadas a las nuevas tecnologías dentro de la currícula escolar, con un esquema similar al de materias tradicionales como Educación Física o Música, lo que implica que la IA sea enseñada como una herramienta de uso cotidiano y no solo como un concepto.
En segundo lugar, la propuesta también busca fortalecer el polo tecnológico del distrito, bajo la premisa de que la formación en estas áreas generará perfiles laborales capaces de insertarse en un mercado en expansión. Por eso, subrayó que la iniciativa fue bien recibida, en parte, porque su comportamiento en el recinto.
Por último, la concejal interpretó la aprobación como una señal de reconocimiento hacia su compromiso con las problemáticas sociales y con una agenda que mira hacia el futuro. En su lectura, el aval del cuerpo legislativo demuestra que, incluso en un contexto de divisiones internas, las propuestas con impacto real pueden avanzar cuando están bien fundamentadas y buscan atender necesidades concretas de la comunidad.
“Cómo concejal, quiero visibilizar mi preocupación por las graves demoras que se registran en PAMI, que afectan directamente a los jubilados. Denunció retrasos de más de tres meses en la entrega de pañales, en la autorización de medicamentos especiales y en la provisión de prótesis, lo que provoca la postergación de cirugías. Además, informó que envió reiterados mails al responsable del organismo, el señor Leguizamo, solicitando una reunión para abordar estas problemáticas, sin haber obtenido respuesta. Esto no es una cuestión política, es una cuestión humana. Nuestros adultos mayores no pueden seguir esperando”, cerró.
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