La Tablada
Un hombre fue mantenido cautivo por un grupo de delincuentes que lo asaltaron cuando llegaba con su esposa a su casa de la localidad bonaerense de La Tablada, pero fue liberado minutos después cuando sus captores le arrojaron una granada a los policías que los perseguían.
Fuentes policiales informaron a Télam que el hecho, ocurrió alrededor de las 23 el domingo último, cuando Pedro Daniel Cattelan (42), y su esposa, Vilma Granito, regresaban en su automóvil Peugeot 206 a su casa ubicada en Chiclana 1370, en el partido de La Matanza.
Al parecer, en momentos en que la pareja estaba por ingresar a su vivienda, fue abordada por dos delincuentes armados que, a punta de pistola, le ordenaron la entrega de las llaves del auto y los obligaron a subir a otro vehículo, un Volkswagen Fox negro, donde había dos cómplices, uno de ellos armado con una ametralladora.
En un primer momento, los delincuentes se alejaron del lugar en los dos autos, pero luego dieron la vuelta a la manzana, liberaron a la mujer, que sufrió un ataque de nervios, y continuaron viaje sólo con Cattelan privado de la libertad.
En tanto, un vecino de la zona que había visto cómo los delincuentes abordaron a la pareja se comunicó con el servicio de alerta 911, por lo que pronto se acercó al lugar un patrullero de la comisaría de La Tablada.
Con la mujer ya liberada, los efectivos a bordo del móvil policial comenzaron a perseguir a los delincuentes, quienes a las pocas cuadras arrojaron una granada de mano cilíndrica de color negra que, si bien no explotó, consiguió que los policías detuvieran la marcha.
Finalmente, y luego de robarle a Cattelan unos 1.000 pesos en efectivo que llevaba consigo, los ladrones lo liberaron en la calle Coronel Domínguez y Franklin Roosevelt, de la localidad de Villa Celina, también de La Matanza, y luego escaparon.
El hombre se comunicó con sus familiares para decirles que se encontraba bien y lo fueron a buscar a ese lugar, distante a unas 60 cuadras.
Según relató más tarde Cattelan a la Policía, notó que los delincuentes no conocían bien el barrio y que tenían la intención de dirigirse hacia la zona sur del conurbano, pero por causas que se desconocen optaron por dejarlo en el lugar.
Por otra parte, peritos expertos en explosivos arribaron al lugar adonde había sido arrojada la granada, a la vuelta de la casa de las víctimas, y constataron que se trataba de un artefacto viejo, que no había estallado, por lo que decidieron detonarlo por precaución.
Las fuentes dijeron que la Policía buscaba en las últimas horas a los delincuentes, para lo cual contaba con los testimonios de las víctimas y del vecino que vio los hechos desde su casa.
Además, los investigadores tienen las grabaciones de las cámaras de seguridad de la Municipalidad de La Matanza donde ocurrió el hecho para intentar identificar a alguno de los ladrones.