Una madre denunció que un alumno ingresó armado a la Escuela Secundaria N.º 167 de Laferrere y acusó a la directora de encubrir el hecho para evitar repercusiones institucionales. La comunidad educativa exige respuestas y mayor seguridad.
Por Verónica Llonto
En la Escuela Secundaria N°167 de Laferrere, partido de La Matanza, un grave episodio generó preocupación entre la comunidad educativa. Un alumno de 15 años habría llevado un arma calibre 38 al establecimiento y se tomó fotografías con otros compañeros en el baño mientras la portaba. A pesar de las denuncias de los padres, los directivos de la institución minimizaron el hecho y recién tras la presión de las familias se radicó una denuncia policial.
En diálogo con Diario NCO, una madre de la institución, a quien llamaremos Roma para resguardar su identidad, relató: “Nos enteramos por el hijo de una mamá que un compañero había llevado un arma a la escuela. Lo tenía en la cintura y se sacaba fotos en el baño. También estuvo alrededor del colegio con el arma, junto a un grupo de alumnos. Cuando lo confrontaron, él lo negó y dijo que era de juguete”.
La preocupación de las familias se agravó por la actitud de la dirección. “Cuando le reclamamos a la directora, no nos creyó y se nos reía en la cara. Por eso hicimos la denuncia policial, porque uno no puede saber qué puede pasar en el colegio o qué le pasa por la cabeza a un chico en un momento de descuido”, explicó Roma.
La madre mencionó que “la directora se negó a que la mamá del chico fuera a la comisaría. En una reunión con todos los padres no se llegó a ningún acuerdo. Ella insistía en que no hacía falta denunciar, que iba a hablar con el padre. Pero cuando el padre llegó al colegio, retiró al chico por veinte minutos, y al otro día aparecieron con un arma de juguete. Los compañeros que la vieron aseguraron que no era la misma”.
Temor, silencio institucional y reclamos de las familias
Roma agregó: “La madre del chico reconoció que su hijo había llevado un arma real a la escuela, una que el padre tenía para vender. Sin embargo, la directora y la preceptora minimizaron la situación. Las autoridades son cómplices por no hacerse cargo ni decir nada. Además, en la reunión también les informamos que se estaban vendiendo y consumiendo drogas en el baño del colegio y que hubo un caso de acoso a compañeras, pero ellas lo negaron todo”.
La entrevistada aseguró que “los inspectores de la provincia van a estar toda la semana en el colegio, pero hasta ahora no se hizo nada. Dicen que el chico necesita contención por sus problemas familiares, pero eso no puede justificar que se niegue el hecho. La directora incluso le pidió al padre que llevara un arma de juguete para que esto no trascendiera”.
Finalmente, Roma concluyó con un pedido de los padres: “Todos estamos reclamando la renuncia de la directora. Si no puede hacerse cargo de tantos chicos, no es digna de su puesto. Nuestros hijos tienen miedo porque no saben qué puede pasar si este chico toma represalias. Muchos ya no van solos a la escuela, los acompañamos todos los días. Entendemos que es un adolescente con problemas, pero llevar un arma al colegio pone en riesgo a todos”.
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