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“Es una vergüenza que el Municipio no le conteste a la Defensoría del Pueblo”

La Matanza vive odiseas cuando se trata de seguridad.
La Matanza vive odiseas cuando se trata de seguridad.

La Matanza vive odiseas constantemente cuando se trata de seguridad, limpieza de las calles y problemáticas que perjudican a todos los vecinos. En el caso del Barrio San Pedro en Isidro Casanova, sucede que hay un puente arriba de un arroyo el cual no tiene barandas y ocurren accidentes constantemente. Ángel Perú, vecino del lugar, pasó por No te Duermas para contar la problemática más en profundidad.

Por Giuliana Salmonte Siciliano

El famoso puente divide dos barrios que son San Pedro y La Reserva y este, está sobre el segundo nombrado, pero afecta a ambos ya que no tiene nada de seguridad, es decir, no posee baranda ni mucho menos luminarias.

“La realidad es que no tiene protección y el arroyo, la pared que tenía, ya está al nivel de la calle y es un peligro constante. A la noche es una boca de lobo porque tampoco hay luminaria pública y si la vienen a arreglar, dura uno o dos días y devuelta se vuelve a romper”, expresó el habitante del lugar.

No obstante es un problema que les abarca a los del barrio, pero también a la gente que va al lugar sin saber a dónde se está metiendo. Ángel cuenta que muchas veces se van sin conocer y los mismos vecinos salen de sus casas para decirles que paren porque hay un arroyo y se pueden llegar a caer.

Además, remarcó que cuando llueve mucho se llena el puente hasta arriba y se convierte en una correntada como un río, y recordó una situación que sufrieron el año pasado en una inundación de la zona: “A un coche casi se lo lleva la corriente, era un auto que no conocía y fue esquivando, casi se cae en el arroyo y se lo lleva la correntada”.

En el caso de la última lluvia el fin de semana pasado, los vecinos tuvieron que mantenerse en alerta porque tenían miedo de que suceda algo grave ante un arroyo que estaba completamente lleno. Donde si se rebalsó fue en la zona del tambo y recién cuando paró comenzó a correr y recién ahora bajó por completo.

El problema principal de la inundación del arroyo es la basura que arrojan los propios vecinos en el lugar. En muchos casos es porque el camión de recolección no llega a las calles y muchos deciden arrojarla sobre los costados. Sin embargo, no saben que después suceden las catástrofes.

Ante la consulta por la limpieza de las calles, Ángel respondió de forma sarcástica: “Antes, hace mucho antes, Acumar venía dos veces por semana y hacía una limpieza profunda, eso nos ayudaba a que no nos inundemos, eso hace muchos años”.

Esto sirve como algo paliativo, en verdad, sirvió como algo momentáneo, pero no se puede vivir muchos años con una solución paliativa. Acumar les dejo de funcionar y hoy en día, el riesgo es de inundaciones constantes. Si se hubiese solucionado en su momento, no estarían en esta situación actual.

“El tema del arroyo es por culpa de la basura y todavía no hemos tenido éxito”

Los reclamos hacia el municipio son claros por parte de los matanceros en todos sus distritos y la respuesta siempre es nula. En el caso del Barrio San Pedro, vienen pidiendo hace ya muchos meses que se limpie la parte que sale a la Ruta 21 porque se acumula mucha basura.

“Ya reclamamos al municipio y conseguimos que Martín y Martín venga una vez por semana a limpiar, pero tiene que haber una política pública en contra de la basura”, señaló el vecino.

No obstante, aseguró que el problema del arroyo es por culpa de la mugre que arrojan los propios habitantes del lugar y pidió que se se los eduque enseñándoles que hay una bolsa para reciclar sea del color que sea.

Ángel Perú, entre otras cosas, manifestó que la excusa del municipio es ‘no tenemos bolsas para reciclar’, pero es una excusa un poco agarrada de los pelos porque eso no importa si a un vecino le decís ‘tirame los plásticos acá, los cartones acá, esto acá’ y después lo llevas a un punto para que Martín y Martín o quien sea lo recoja.

El cansancio de los vecinos ante los reclamos sin respuestas

El hartazgo de los habitantes del lugar es notorio por la falta de ocupación del barrio. Lograron ponerse de acuerdo entre todos para presentar informes en el Concejo Deliberante y los concejales los aprobaron, pero no hubo novedades sobre eso.

Lo que sí saben es que la política de La Matanza está enterada de la situación, pero no conformes con eso, pasaron por la Defensoría del Pueblo para hablar temas relacionados con Acumar y el Municipio, pero entre ambos no hay comunicación.

Para finalizar, remarcó la falta de compromiso del Estado con los vecinos: “Es una vergüenza que el Municipio no le conteste a la Defensoría del Pueblo porque eso es lo que están haciendo, estamos totalmente abandonados. Ellos se enteran que nosotros nos inundamos, les vamos a hablar y no vienen, y cuando vienen se enojan con nosotros en vez de nosotros enojarnos con ellos”.

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