Lo escuchaste en No Te Duermas
Facundo Tejerina, de la organización Barrios de Pie se refirió a cómo la crisis golpea en los comedores comunitarios. Además cuestionó al Ministerio de Capital Humano, que a pesar de haber comprobado la existencia de los comedores en las auditorías, no entrega alimentos.
Entrevistado en No Te Duermas, Facundo Tejerina, integrante de la organización Barrios de Pie, describió la difícil situación que atraviesan los sectores más vulnerables, en particular los comedores comunitarios. A pesar de haber superado las auditorías realizadas por el Ministerio de Capital Humano, estas instituciones no han recibido mercadería, lo que ha obligado a reducir la frecuencia del servicio.
“No ha llegado nada, ni un paquete de leche, ni un paquete de arroz, ni fideos ni nada”, aseguró Tejerina, que además contó que los mismos funcionarios que realizaban las auditorias “se llevaron la sorpresa de que los comedores funcionan y que había una alta demanda”. Pero de nada sirvió cumplir con los requisitos impuestos por al gobierno Nacional.
En este sentido, el dirigente social añadió: “lamentablemente sigue teniendo las políticas de ajustes, la política de opresión hacia el que más necesita. En estos últimos tiempos, lamentablemente, no hemos recibido absolutamente nada de parte del gobierno nacional y la verdad que se está complicando muchísimo más la situación en cada uno de los merenderos”. Además, señaló la dificultad que enfrentan muchas familias para costear los útiles escolares de sus hijos, afectando su acceso a la educación.
La demanda de alimentos en los comedores ha aumentado significativamente, mientras que los recursos siguen siendo insuficientes. “Nosotros poníamos tres, cuatro veces a la semana según lo que se podía, pero el contexto actual no es el mismo de años anteriores. La cantidad de familias que vienen hoy en día es mucho mayor, y la verdad es que hemos tenido que recortar los días porque no se da a basto”, explicó.
El recorte y el ajuste en la entrega de alimentos se ha profundizado, afectando a los sectores más necesitados. “Se están cerrando algunos comedores porque no se llega. Hay una situación que es dura y que es cruel y que está a la vista de todos, pero hay algunos que no la quieren ver. La realidad es que no alcanza, no alcanza”, enfatizó Tejerina.
Actualmente, la mayoría de los comedores han reducido sus días de atención a solo uno o dos por semana, dependiendo de la cantidad de familias que asisten. En muchos casos, estas familias están compuestas por ocho personas o más, y se ha registrado un incremento en la demanda de jubilados y personas que, a pesar de tener empleo, no logran cubrir la canasta básica. “No les alcanza porque el alquiler te lo subieron, la luz estás pagando el doble, el triple”, agregó.
Uno de los momentos más angustiantes para quienes trabajan en los comedores es ver cómo los alimentos se acaban mientras todavía hay una larga fila de personas esperando. “Se hace un nudo en la garganta cuando viene un jubilado y lamentablemente no tenés nada para darle”, expresó con pesar.
A pesar del fallo de la Corte Suprema que ordena la entrega de alimentos, la realidad en los comedores sigue siendo crítica. La comunidad ha mostrado solidaridad, pero el esfuerzo de los trabajadores de la economía popular y vecinos no es suficiente para cubrir una necesidad básica que sigue desatendida por parte del Estado.
Te Puede Interesar:
https://www.instagram.com/diarioncomatanza
https://facebook.com/diarionco
https://youtube.com/@diarionco2150
