Lo escuchaste en No Te Duermas
En el programa radial se habló con Gastón Figueroa, delegado de Medamax, que contó cómo continúan los reclamos por los 70 trabajadores despedidos a raíz del cierre de la sucursal de Laferrere.
Tomás Modini
@ModiniTomas
La situación del acampe
En el comienzo de la conversación telefónica en No Te Duermas, Gastón Figueroa contó cómo viene la mano con el reclamo: “Seguimos en el acampe, decimotercer día consecutivo ya que estamos acá. El frío no cesa al igual que nosotros y nuestra lucha”.
“Hoy continuaremos con el escrache a una de las sucursales a ver si nos dan una respuesta que intuyo que ya se va a venir porque están haciendo irregularidades que no pueden tener más sostén. Tendrían que haber venido el viernes a abrir el portón para que nosotros retiremos las pertenencias particulares y no cumplieron con eso”, aseguró.
Luego sumó que “no se presentaron, ya fuimos a la fiscalía a hacer la denuncia pertinente y esa es una obligación, la de presentarse” y que “deduzco que va a haber novedades”.
“Una actitud intencional”
En cuanto al escrache en una de las sucursales, detalló: “Escrachamos la sucursal de José C Paz. Lo encontramos ya preparados, atrincherados, encerrados con el personal también. Notamos lo que queríamos saber, las mercaderías de las góndolas llenas con los precios a la mitad de lo que lo estábamos vendiendo. Nada que ver a lo que estábamos haciendo nosotros, obviamente notamos que lo estaban haciendo intencionalmente”.
“La nuestra no era competitiva con otras sucursales que estaban cerca. Nos preguntamos cuál era el beneficio de ellos y cuál era la situación. Pero es obvio que lo que estaban haciendo es justamente promover la baja de ventas y que no sea competitiva para poder tener una excusa a la hora de cerrarla”, sostuvo.
Ante la pregunta de la mesa de la cantidad de sucursales que tiene la empresa, indicó que “en el día de hoy hay cinco sucursales, llegaron a tener 9” y que “desde fin de año, precisamente con el cambio de gobierno, empezaron a vender sucursales”.
“Vendieron la de San Miguel, la de Bahía Blanca, la de Salta y bueno ahora cerró esta que no fue ni siquiera vendida. En las que vendieron tengo entendido que el puesto de trabajo se pudo haber mantenido porque la empresa que compraba adquiere a los empleados. Nosotros ni siquiera esa posibilidad, nada”, señaló.
El apoyo de las autoridades
Por otro lado, se refirió al apoyo de las autoridades: “La verdad que la única intervención que tuvo el Ministerio de Trabajo fue el miércoles con la audiencia que no se presentaron en la que se intimó pero solo eso. Quedó en la nada, no los obligan a presentarse y es una cosa que me queda pendiente que es acercarme y dialogar de cómo es la situación para acelerar los trámites”.
“En el Municipio se acercó el concejo deliberante, fueron citados compañeros míos para hablar sobre la situación. El acompañamiento está pero no presencial si se puede decir. Es firme por lo menos para que esto se resuelva”, destacó.
Por último, se expresó por sus compañeros diciendo que “el viernes cuando se enteraron de que no abrían las puertas, obviamente que los chicos estaban totalmente calientes por esta situación. Con un poco de desazón porque no hay diálogo ni acompañamiento pero yo les comenté que eso es una intencionalidad de la empresa para quebrar nuestra resistencia. El pensamiento de la empresa es que no vamos a seguir acá por el tiempo, el frío, la necesidad monetaria, por las deudas”.
“Pero les digo que no se preocupen que de a poco los van a ir llamando. Y es lo que pasó, ese mismo día empezaron a llamar para ver si estaban de acuerdo con el 100 por ciento del pago en 12 cuotas. Y los mismos chicos le dijeron que no y que van a seguir con el plan de lucha para conseguir la indemnización que corresponde”, concluyó.
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