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En el segundo tramo de la nota del programa radial, Matías Espain analizó la situación del radicalismo en el contexto actual.
Tomás Modini
@ModiniTomas
La mirada sobre el radicalismo
El análisis de Matías Espain sobre los dirigentes radicales comenzó con nombres puntuales: “Lo de De Loredo es rarísimo que grite como marrano diciendo que todo está mal y que después levante la mano para votar, es una cosa insólita”.
“Yo creo que entre los dos, Manes y Loustau, es un radicalismo que tiene un nivel de coherencia, más allá de la cuestión puntual de lo que pasó que levantaron la mano para levantarse el sueldo. Creo que eso fue un error garrafal que no tiene nada que ver con la realidad”, amplió.
Sobre esto se mostró crítico diciendo que “Si nosotros estamos hablando de que no le aumentan a los jubilados, cambian la fórmula, aumentan las tarifas, aumenta el transporte, paren un poquito, no se pueden aumentar el sueldo. No es razonable”.
“Yo creo que entre Loustau y Manes son dos que calculo tendrán mayor relevancia. Manes más en Provincia y Loustau en Capital”, añadió.
“Falta sentido común”
Por otro lado, el dirigente de la UCR dejó una mirada sobre la sociedad y la política: “Acá lo que falta es sentido común. Y la gente está enojada y por eso terminamos como terminamos. Terminamos con Milei en la presidencia porque la gente está enojada y con toda la razón del mundo”
“Porque el problema es que la política tiene que empezar a solucionarle el problema a los vecinos y a la población, y es lo que justamente está faltando”, desarrolló.
Específicamente sobre su espacio y la relación con la Ley Bases, sostuvo que “está disociado evidentemente lo que piensan las bases del radicalismo con lo que piensan los dirigentes del radicalismo” y que “el radicalismo lo que tiene que discutir en breve, y ya ponerlo para la próxima convención, es que es el radicalismo, a quienes representa y cuáles son las políticas públicas que defendemos”.
“Es insólito que levantes la mano para privatizar empresas. Durante los 90’ hasta que terminó el gobierno de Menem, fuimos los únicos en estar en contra de las privatizaciones. Hoy no sé qué pasó”.
La situación en La Matanza y las elecciones dentro del partido
En continuidad con lo anterior, se expresó sobre lo que sucede en el Municipio: “Loustau y Manes tienen representaciones, hoy por hoy estamos pensando bastante parecido más allá de las diferencias pasadas. Las que teníamos en el pasado eran porque evidentemente teníamos parte de la cuestión natural de estar en contra del kirchnerismo y la diferencia estaba entre algunos”.
“Hoy se sacó de foco eso y está claro que lo que pensamos no está alejado de la realidad de nuestro partido. Estamos lejos del pensamiento del partido de la Libertad Avanza, eso está claro”, sumó.
En cuanto a las elecciones dentro del espacio, indicó que “hubo hace un año y medio y debería haber a fin de año, lo que pasa es que no están convocadas”.
“Pero la verdad que una interna en este momento con la realidad que se está llevando no tendría sentido. Lo que debería haber es una unidad de pensamientos que es lo que estamos tratando de llevar adelante”, aseguró.
El rol como oposición
Para cerrar, reflexionó sobre lo que viene: “Yo creo que hay que construir una alternativa diferente sin dudas y hay que ser oposición al gobierno nacional. Creo que hay que ser bastante amplio en la construcción porque la política que está llevando adelante este gobierno puede hacer un polo de poder y hay que enfrentarlo con todo lo que se pueda para poder ganarle”.
“Hay cuestiones que el radicalismo no puede apoyar de ninguna manera como la flexibilización laboral. Pero bueno están cambiando figuritas con los gobernadores y evidentemente tienen ejercicios de poder sobre sus senadores. Yo creo que lo que tiene que pasar es que los senadores recapaciten y que voten lo que tengan que votar”, concluyó.
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