
Thiago Audicio es de Almirante Brown, paciente en el Hospital Gutiérrez y en la Fundación Favaloro, y desde el año pasado se encuentra a la espera de los órganos que puedan mejorar su calidad de vida.
El trasplante de órganos es un tratamiento médico indicado cuando todas las alternativas para recuperar la salud del paciente han sido agotadas. Este procedimiento solo es posible gracias a la voluntad y solidaridad de las personas que dan su consentimiento para la donación.
En este sentido, Gimena Corallo, mamá de Thiago (12), habló con Haciendo Radio, una producción de Diario NCO, que se emite de lunes a viernes de 10.30 a 13 horas por la 20 20 NCO Radio, e invitó a la reflexión sobre la importancia de ser donantes.
“En este momento Thiago está bien, está estable. Se encuentra en lista de espera para un trasplante bipulmonar. Gracias a Dios podemos esperarlo en una situación estable, que eso es muy bueno”, sostuvo la entrevistada.
Y explicó: “Thiago entró en lista de espera en agosto del año pasado. Su problema es desde los once meses de edad. Recién el año pasado, cuando empeoró, pudo entrar en lista de espera”.
Un virus intrahospitalario
En este sentido, Gimena indicó que su hijo nació sin problemas de salud y que a los once meses sufrió una bronquiolitis en época de invierno. En ese tiempo, con las idas y venidas a la guardia de la clínica, el niño contrajo un virus intrahospitalario.
“Es ahí donde empezó todo, porque no sabían qué era lo que le estaba pasando. El daño que generaron esos virus, le destruyó completamente los dos pulmones”, expresó la mujer.
Además, Gimena relató que, en esos meses de internación, los médicos no le daban esperanza de vida al pequeño Thiago, ya que se encontraba conectado a un respirador artificial, pero que “él lo logró”.
A pesar de la situación que les tocó atravesar, Thiago pudo realizar una vida normal, aunque con algunas limitaciones. No pudo hacer ningún tipo de deporte, ni siquiera gimnasia en el colegio.
Una recaída
La entrevistada contó que “en el 2018, él tuvo una recaída, sus pulmones colapsaron y estuvo cuatro meses internado”, los médicos indicaron que “lo último que quedaba por hacer es el trasplante” y el año pasado ingresó a la lista de espera nacional.
En este sentido, la mujer dijo: “Lo que es estar en lista de espera es muy difícil, pasan los días y los meses esperando esa llamada. Me suena el celular con un número desconocido y me tiembla todo el cuerpo”.
“Se vive con el bolso preparado por las dudas, con los estudios a mano, y esperando y rogando que él siga estando estable hasta cuando llegue, que es lo más importante, que no empeore, que sus pulmones no vuelvan a colapsar”, indicó Gimena.
Asimismo, la entrevistada explicó que, al estar estable, hay personas que tienen prioridad antes que el jovencito, ya que estas se encuentran en un estado crítico y conectadas a máquinas mientras esperan a los donantes.
Pelearla y concientizar
Gimena contó que ella y su esposo son “trabajadores”, que tienen a Thiago y a Paloma (4), que su hijo no recibe pensiones del Estado y que la vienen “peleando hace muchos años” para mantener en buen estado la casa para el día que se dé la operación.
“Tenemos fe de que en algún momento va a llegar el ángel donante y que podamos recuperar un poquito la vida”, expuso y agregó: “Es a esa fe a la que nos aferramos para poder hacerlo más llevadero”.
En este sentido, la mujer invitó a la sociedad a tomar conciencia sobre la importancia de ser donantes, no solo de órganos, sino también de medula ósea y sangre, ya que “donar mejora, alarga y salva vidas”.
“Thiago es un preadolescente, tiene toda una vida por delante, y el trasplante es la única forma que tenemos para poder garantizar que él pueda tener una vida un poco más normal”, sostuvo la entrevistada.
https://facebook.com/diarionco.