“No somos la gata flora”

San Justo

Paulino Guarido, Secretario General del SUTEBA – La Matanza, analizó con NCO, el pasado conflicto docente en la provincia de Buenos Aires y remarcó que “No somos la gata flora” sino que más bien, acordaron y superaron el conflicto más allá de las criticas al gobierno provincial.

“Lamentamos haber tenido que recurrir a medidas de acción tan duras al comienzo del ciclo lectivo, por lo que significa en inquietud y zozobra para las familias, principalmente para las más humildes, que son aquellas que más necesitan de la escuela pública” aclaró Guarido y explicó que “Nosotros hacemos una fuerte critica a las autoridades por no haber habido propuestas serias en febrero ó al apresuramiento en cerrar la paritaria nacional, que dejo un piso salarial bajo y que costó elevarlo en las provincias y, en la dificultad que tuvo la provincia de Buenos Aires en realizar una propuesta seria a los $60 al salario básico que propuso en febrero. Luego de las medidas de fuerza y de algunas otras propuestas, se acordó en $266 en el básico del maestro de grado y llevó el salario inicial en Buenos Aires a $2900”.
Más allá de no haber obtenido respuestas a todos los planteo, Paulino Guarido sostiene que “Para nosotros esta suma sigue estando lejos del norte que tenemos que significa que un docente debe trabajar en una educación de calidad para nuestros pibes, un turno con horas institucionales en contraturno para planificar sus tareas y relacionarse con la comunidad educativa de otra manera pero, con los salarios actuales, que son bajos, no permite desarrollar esté tipo de tareas para mejorar la calidad educativa. Lo consideramos un avance, pero como no queremos ser la gata flora con esto, acordamos. Ha habido una mejora, se ha hecho un planteo distinto al mes de febrero; esa mejora se siente porque está en el salario básico. Por más que hayamos llegado a un acuerdo, avalado por el 95% de las asambleas distritales del SUTEBA, con las críticas que nosotros planteamos, sigue siendo un salario bajo, que exige una recomposición histórica que reconozca y jerarquice a los trabajadores de la educación”.
El Secretario General del SUTEBA – La Matanza afirma que“Hay un compromiso con las autoridades provinciales para armar una comisión, que pretendemos que sea una comisión que funcione, para rever el tema del salario familiar porque las compañeras, cuando reciben un peso de aumento salarial, peligro el cobro de la asignación familiar, que nosotros creemos que debe ser universal. El otro tema conflictivo sin resolución es el impuesto a las ganancias, cuando recibimos un aumento salarial, somos víctimas de un doble juego, por un lado, muchas compañeras dejan de cobrar todo o parte del salario familiar y, por el otro lado, nos hacen retenciones por el impuesto a las ganancias. Esto está planteado desde la CTA y por los compañeros de la CGT; desde la paritaria docente provincial no podemos resolver esté tema que es nacional. Está es una situación de absoluta injusticia, los docentes bonaerenses no obtenemos ganancias, tenemos sueldos” y asegura que “El déficit provincial no puede ser una excusa para no cumplir a futuro una propuesta que han hecho. El gobierno provincial tiene la obligación de cumplir este compromiso; creemos que está garantizado este salario pero, también vamos a estar atentos a la evolución de los precios en función del deterioro que pueda tener el salario respecto a la inflación. No está planificada la reapertura de las paritarias a mitad de año pero esto, no nos inhibe a nosotros, ante la existencia de un desfasage extraordinario, a exigir lo corresponda”.
Respecto a los dichos de la Presidenta ante la Asamblea legislativa del 1° de marzo, Paulino Guarido sostiene que“La posición de la conducción del SUTEBA así como la CTERA, es la de valorar esta etapa que esta atravesando nuestro país, apoyando este proceso de cambio. Los trabajadores están mejor y, en este marco y profundizando el modelo, que ha de distribuir los recursos de manera más equitativa; porque la sintonía fina es esto, mejores salarios y más trabajo; dentro de este camino creemos que van a haber mejores condiciones para la escuela pública” y admite que “Eso no quita, que hagamos una valoración absolutamente critica de las desafortunadas palabras de nuestra Presidenta, porque fue muy injusto. Si nos atenemos a los dichos de la Presidenta, a mi me deben cinco años de vacaciones, porque si hacemos la cuenta de los tres meses de vacaciones y por los años de carrera, a mi me deben ese tiempo de vacaciones. Los dichos generaron mucha indignación y, algunas notas de humor, que no llegaron a tapar la indignación de los compañeros. Fueron argumentos que se esgrimieron en otros momentos, por otros funcionarios, periodistas y gobernantes que vivían a contrapelo de las políticas que lleva adelante este gobierno”.