
El gobernador de la provincia de Buenos Aires fue tajante con la oposición y los medios de comunicación y explicó que no existe el “impuestazo” del que se acusa al Gobierno y explicó en detalle que se trata de un arancel progresivo que busca proteger a los que menos tienen.
Luego de varios días en que sobrevoló una frase que se hubiera aplicado mejor a las subas en el Gobierno de Mauricio Macri que llegó a aumentar más de 2000 por ciento los servicios en general, el actual gobernador, Axel Kicillof, salió al cruce y dejó en claro que los aranceles que se cobrarán por la “ley impositiva” cuidará a más del 90 por ciento con tasas por debajo de la inflación y solo afectará por encima de ella a un seis por ciento de propietarios de tierras.
En comunicación con Radio 10, el mandatario provincial aclaró que “no hay suba de impuestos. Lo que está pasando es que hay una ley que quiere mantener la recaudación del año pasado en términos reales y además una escala progresiva donde a los más pequeños se les cobra menos y es la gran mayoría”.
Marcando diferencias con las exorbitantes subas realizadas en la administración macrista, indicó: “Lo que sí, es que hay un sector más concentrado en términos de la propiedad, urbanas y rurales, al que no se le está planteando un tarifazo del 1000 por ciento como hizo Macri”.
“Me parece que hubo un par de días donde muy fuertemente en consonancia con algunos medios de comunicación, nuestra oposición ataca una ley que no es una agresión a la clase media y además que forma parte de un conjunto de medidas que favorece el consumo, el comercio, el mercado interno”, criticó Kicillof.
Mentiras y tergiversación de la oposición
Siguiendo con la tesitura de explicar punto por punto, definió que la oposición en connivencia con los medios masivos de comunicación crearon una estructura falaz para criticarlo: “Creo que el marco que armaron del impuestazo y que el Gobierno no quiere negociar son mentiras y sobre la base de esa mentira armaron el show que todos conocemos. Me parece que hay que reconducir la negociación sobre bases ciertas”.
Asimismo, reveló el estado calamitoso en que recibió la gobernación y puntualizó que “la Provincia tiene una deuda muy difícil de afrontar. Según la UCA el 63 por ciento de los niños del conurbano está en la pobreza, que deja a la clase media, los profesionales, comerciantes y pequeños productores en una situación de desesperación, de pérdida del empleo y de sus negocios”.
“La verdad que es muy difícil, veo como improbable la maniobra a 19 días de asumido, que sobre la nada misma plantearque hay un impuestazo para la clase media”, insistió Kicillof.
La explicación del supuesto “impuestazo”
Aclarando los dichos que hablaron de grandes aumentos, el gobernador enfatizó: “En promedio es un poco menos que la inflación. Después hay una segmentación, una progresividad, la propiedad más pequeña paga nada o el 15 por ciento de aumento, tiene una rebaja de impuestos. La gran mayoría tiene una rebaja en términos reales, pero eso se hace cobrando un poco más a los que más pueden”.
“Nosotros habíamos planteado una enorme flexibilidad, nada más que optaron (la oposición) por hacer negocios políticos. Ha habido mucha falsedad y mucha irresponsabilidad, una intención de hacer política diciendo ´impuestos enormes, vamos a defender a la clase media´. Llegaron un poco tarde porque estos cuatro años la quebraron”, fulminó el mandatario provincial.
Definiendo como necesaria esta medida y nuevamente cargando las tintas sobre la oposición, Kicillof expresó que “hoy la Provincia está con un déficit enorme, una deuda enorme y con graves problemas económicos y sociales. Si no nos dejan hacer un aumento igual a la inflación y un poco más para los que más tienen me parece que están haciendo otro juego”.
Por último, desmintió que la oposición quiera “proteger” a la clase media y concluyó que “me parece que intentan llevarse una victoria política no defendiendo a la clase media, sino a los que más tienen”.