En la plaza principal de Gregorio de Laferrere se vivió el encuentro de Argentina vs Francia con mucha ilusión. Se dispuso, como en el anterior partido, tribunas y sillas frente a una pantalla gigante.
Alejandra Lajas
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Desde temprano, la comunidad se concentró en el espacio cedido por el municipio de La Matanza para que los aproximadamente mil vecinos, entre chicos y grandes, pudieran disfrutar de este acontecimiento alentando a la Selección Argentina.
Gregorio de Laferrere se vistió con la albiceleste. La avenida Luro, se encontraba vacía, pero dentro de los locales, comerciantes y empleados estaban expectativos a las pantallas de televisión con las camisetas, banderines y gorros argentinos.
En un sector de la plaza Ejército de los Andes, el Municipio armó gradas y agregó sillas frente a una pantalla gigante para que las familias pudieran disfrutar viendo jugar a la selección.
Los vecinos reunidos en el predio tenían muchas esperanzas, pero también mucho nerviosismo. Aún con el 1 a 0 inicial, no perdió en la gente el pálpito de que se podía llegar a la victoria.
Y no se hizo esperar, el gol de Di María hizo vibrar a la gente y los corazones comenzaron a latir con más fuerzas dándoles aliento a esos muchachos que estaban dejando todo en la cancha.
El empate daba esperanzas y con esos fervores, grandes y niños esperaron el segundo tiempo. Cuando llegó el gol de Mercado toda la tribuna lo vitoreó y comenzaron los cánticos de aliento.
Este revés llenó de expectativas a los habitantes de la localidad que no paraban de cantar y agitar las camisetas y los banderines pero la desilusión vino cuando Francia pasó a primer lugar, en la cara de la gente se vislumbró la derrota.
Esa derrota que ni con el tercer gol había posibilidad de igualar al adversario, ya no había más tiempo, las expectativas de llegar a cuartos de finales dejó a los vecinos, con ese sabor amargo y con mucho dolor, no podían creer que la Selección se volvía a casa.
