
A pocas horas de que el triunvirato que conduce la CGT nacional anunciara un paro de 24 horas para el lunes 25 de junio, el secretario general de la central obrera Regional La Matanza, Mario Ortiz, dialogó con Diario NCO y se mostró conforme con la medida tomada. “No había otra opción y creo que las distintas regionales tuvimos mucho que ver con la decisión de la conducción, ya que las bases exigían una medida como está”, dijo el dirigente textil.
Por: Carlos R. Correa
carloscorreaprensa@gmail.com
Cauto, sereno, sin mueca alguna que denunciara euforia, el titular de la CGT Regional La Matanza, Mario Ortiz, una vez anunciada la medida de fuerza para el 25 del corriente, se expidió rápidamente respecto a las sensaciones que experimentó cuando conoció el anuncio. El dirigente señaló que siguió atentamente por televisión la conferencia de prensa que ofreció la cúpula sindical y horas más tarde ya estaba opinando sobre la medida de fuerza.
“Era imposible que suspendieran los despidos”
“Era lo que todos los trabajadores esperaban. No había otra opción, porque era sabido que esos famosos cinco puntos fue una estrategia para ganar tiempo. ¿Qué pretendía el gobierno? Porque no hay que olvidarse que el año pasado vetó la ley que suspendía los despidos por seis meses argumentando que después iban a venir las inversiones y que iban a crecer las fuentes de trabajo… ¿y ahora qué?, ¿iban a aceptarlo? Era imposible que eso sucediera” puntualizó el mandamás de la central obrera local.
A renglón seguido, el también concejal del PJ en el HCD dijo no comprender cómo “después de haber destruido a la industria nacional el Gobierno llama a una mesa de diálogo, cuando en más de dos años y medio de gestión nunca ha tomado una medida que haya beneficiado a los trabajadores” y seguidamente criticó el rumbo económico del Gobierno al advertir que “todos sabemos que todos los días están cerrando empresas. Y los despidos no cesan, al contrario, cada vez hay más compañeros que se quedan sin trabajo y esa situación se va a profundizar”, declaró con pesimismo.
A continuación Mario Ortiz expresó que “la decisión de declarar una medida de fuerza que tomó el triunvirato fue la que correspondía y la verdad, si en los días previos al alguien le pareció que fui duro con la conducción nacional, en realidad fue una manera de alertar de lo que estaba sucediendo en los lugares de trabajo. Yo recorro las fábricas todos los días y los compañeros estaban muy molestos por la falta de medidas de protesta concretas”.
“Cada vez que recorremos las empresa para conversar y estar al lado de los trabajadores, nos comentan lo preocupados que estánpor la situación económica. Resulta que ahora muchos están cobrando la quincena en dos cuotas y no son valores altos, algunos no llegan a ocho mil pesos y encima se lo abonan en dos veces, cuando no en tres y la verdad es que con suba de precios la plata no alcanza para nada” especificó el dirigente.
“Los cinco puntos eran insuficientes”
Más adelante, el referente del gremio textil consideró convencido que “esos cinco puntos que se intentaron acordar con el Gobierno no alcanzaban. Esto va mucho más allá, porque la situación es mucho más complicada que ese puñado de puntos… Hay que tener en cuenta que los dirigentes zonales estamos peleando con los industriales por mantener las fuentes de trabajo y que no se bajen las cortinas. Día a día están cerrando empresas y hay compañeros que están quedando en la calle por lo que el paro era impostergable”.
En otro tramo de la conversación, Mario Ortiz señaló que “en la medida que no se produzca una reactivación de la parte productiva, que las empresas vuelvan a tener trabajo y haya mayor consumo, todo lo que se acuerde con el Gobierno es insuficiente” e inmediatamente justificó el encuentrode la semana pasada sosteniendo que “me dio la impresión que los muchachos no se podían negar a ir”.
“En ese caso la decisión que tomaron el martes, me pareció un actitud inteligente, ya que por arreglar el tema de las obras sociales, no era correcto que se olvidaran de los compañeros trabajadores que día a día que están sufriendo y en algunos casos, sus mujeres tuvieron que salir a trabajar por hora para poder comprar los alimentos y poder pagar los tarifazos”, sentenció el gremialista.
Sin producción, sin venta y sin consumo
Cabe recordar que las exigencias de los líderes cegetistasplantearon durante la semana pasada ante la Casa Rosada fueron cinco a saber: frenar los despidos por seis meses, reabrir las paritarias sin techo, eliminar el pago de ganancias en el medio aguinaldo de junio, devolver los fondos adeudados a las obras sociales sindicales y que no haya cambios en la Ley de Contrato de Trabajo”. Una utopía, si se considera que la mayoría de esos puntos son parte de las condiciones que puso el Fondo Monetario Internacional para concederle el crédito.
En ese sentido, el secretario general de la CGT Regional La Matanza explicó que “era obvio que no iban a aceptar esos pedidos, que por otra parte, según mi parecer eran muy pocos” ya que consideró que “se debieron reclamar medidas más profundo para que cambie el rumbo político. Eso -de haberse aceptado- no hubiera servido de nada. La realidad dice quelas empresas no tienen trabajo porque lo que producen, no se vende”.
Continuando con su análisis, el sindicalista cree que “para que haya reactivación el Gobierno tiene que parar las importaciones porque hoy, la que más está sufriendo es la industria”, y también se refirió al “alto impacto que produjo en las empresas la suba en los servicios de luz, gas y agua” y cree que si hay una negociación con el Gobierno “tiene que haber, como mínimo, 10 o 15 puntos que se cumplan de verdad”.
La unidad es imprescindible
En referencia al acuerdo formal de unidad del movimiento obrero local, Ortiz manifestó que se dará “cuando se termine esta situación de anarquía, cuando se unifique la CGT nacional y se tenga en claro quién vendría a normalizar a la central de los trabajadores de La Matanza” y añadió: “Todos tenemos que estar en una sola línea porque no vienen por los dirigentes, sino por los laburantes y los jubilados que se están cagando de hambre”, declaró indignado.
En esa misma línea, el titular de la central obrera de La Matanza fue claro al manifestar que “lo más lógico es tener paciencia y esperar. Pero mientras tanto tenemos seguir trabajando juntos. Hay muchos gremios que están por afuera y hay que meterlos adentro. No podemos volver a cometer el error de separarnos por la política o por otros temas. Los dirigentes tenemos que deponer cualquier actitud y tener, desde La Matanza, un plan estratégico en defensa del trabajo”.
Para ir terminando, Mario Ortiz retomó la propuesta inicial indicando que “más allá de todas estas cuestiones que hacen a la coyuntura gremial en el plano local, creo que la medida que finalmente tomó la conducción nacional de la CGT de parar el 25 de junio por 24 horas, era la decisión esperada que refleja lo que la mayoría de los trabajadores pretendían” aunque igualmente cree que “los que estamos en el sector de la industria, debemos insistir en exigir que la mesa debe hacer más hincapié en el tema de las importaciones, porque si siguen con ese nivel, la vamos pasar todavía peor”.
Como corolario, el secretario general de la central obrera, Regional La Matanza, culminó su intervención diciendo que “de ahora en más estaremos muy atentos a lo que irá sucediendo en las próximas semanas y como corresponde, seguiremos desde las regionales haciendo los reclamos necesarios para ayudar al consejo directivo nacional de la CGT, desde abajo hacia arriba, a implementar otras acciones a favor de los trabajadores”.