
El grupo voluntariado se encarga de juntar sachets de leche y yogurt para armar productos impermeables que son donados a quienes más lo necesitan. El proyecto nació en el 2013 de la mano de Goga Dodero en la localidad de Béccar, tal fue su impacto social que hoy la iniciativa se desarrolla en diferentes puntos de la Argentina e incluso en otros países.
Por Mailén Britos
britoscostamailen@gmail.com
Twitter: @mailenbritosC
La sachetera es un proyecto solidario y voluntario que con su amor logra que la gente en situación de calle que lucha contra viento y marea pueda blindar el frio que sufre en época invernal.
La organización cuenta con varios grupos en el país: Mar del plata, Balcarce, Tres de Febrero y La Plata, entre otros. La duración de los encuentros es de cuatro horas y se llevan a cabo de marzo a septiembre lo cual serían siete jornadas a lo largo del año, que su realización tiene lugar el primer domingo de cada mes.
“Este proyecto surgió de la mano de Goga Dodero cuando una amiga le regaló una bolsa que había hecho con sachet, como Goga es vestuarista se le ocurrió confeccionar abrigos para los que lo necesitan. Yo junto a mi amiga Inés Rivero, éramos voluntarias cada una por su lado pero queríamos hacer algo juntas, investigamos en internet y descubrimos la sachetera que nos pareció brillante”, comentó a Diario NCO Gabriela Pavón, coordinadora de La Sachetera de zona oeste.
Como se menciona más arriba, con el paso del tiempo la sachetera se fue expandiendo y llegó a varios sectores de la Argentina. El crecimiento de la agrupación fue tan grande que también formó grupos en los países de Uruguay y Ecuador. Cada uno tiene entre dos o tres coordinadoras que trabajan para el sector donde esté ubicada cada agrupación buscando el lugar donde llevar a cabo las tareas y recibir sachets, incentivando a la gente a convertirse en voluntaria y coordinar la entrega con los grupos de recorrida nocturna.
¿Se puede reciclar y al mismo tiempo fabricar algo útil con dicho reciclado? La respuesta es sí, y eso es de lo que se encarga este grupo de voluntarios. El objetivo es que aquella bolsa de dormir o ponchito de lluvia que se construye a base de sachets reciclados sea entregado a esas personas en situación de calle para que puedan amortiguar el frío o la lluvia bajo los paños impermeables que la organización voluntaria confecciona en cada encuentro.
“El año pasado todo lo que creábamos se lo dimos a una red solidaria de caseros que lo reparten en el horario en el que le dan de comer a la gente en situación de calle, este año todo lo confeccionado será entregado a la Fundación Si de zona oeste. También, en abril de este año le entregamos a niños de la comunidad QOM 60 ponchitos de lluvia”, continuó Gabriela Pavón.
La coordinadora del grupo de Zona Oeste, contó que dicha agrupación en Tres de Febrero nació hace un año a raíz de la iniciativa que tuvo con su íntima amiga. Ambas buscaban unirse a un proyecto solidario y cuando descubrieron La sachetera les pareció una muy buena idea por lo que optaron por contactarse con la fundadora Goga Dodero y así comenzar el proceso de formación del grupo en esta área del conurbano bonaerense.
En la actualidad, los encuentros en Tres de Febrero se llevan a cabo en la localidad de Villa Bosch en el club Güemes donde el presidente de dicho club les brinda -sin fines de lucro- el espacio para que puedan desarrollar las juntadas y poder elaborar durante cuatro horas las bolsas de dormir y ponchitos de lluvia junto a las voluntarias.
“Las reuniones se realizan el primer domingo de cada mes de 14 a 18 donde cada persona deja un rato su familia o su paseo para dedicarse a dar una mano y ayudar al prójimo. Tenemos un grupo consolidado de voluntarios aunque siempre esperamos a alguno nuevo porque es abierto a toda la comunidad. Han venido maestras, boy scout, siempre alguien nuevo se acerca”, comentó Pavón.
El procedimiento que se realiza para crear los paños consta en abrir todos los lados del sachet para que quede como una hoja A4, luego se lava con detergente para que quede bien limpio y por último se une sachet con sachet con una selladora. Otra forma alternativa de realizarlo es con una máquina de coser. Se une una tira de nueve sachets con otra tira de ocho sachets a la mitad y así quedan conformadas las piezas. Por encuentro se llegan a confeccionar un promedio de 20 bolsas de dormir y ponchitos de lluvia, con mucho esmero, dedicación y amor, por sobre todas las cosas.