El Papa expresó que las diferencias entre católicos y protestantes golpean “especialmente” a los matrimonios con “confesiones distintas”.
Por Corresponsal
“Las diferencias en cuestiones de fe y moral que todavía subsisten son desafíos en el camino hacia la unidad visible, a la que anhelan nuestros fieles”, aseguró el Pontífice en un encuentro con una delegación ecuménica de la Iglesia Evangélica alemana.
“El dolor es advertido especialmente por los esposos que pertenecen a confesiones distintas. Nos debemos esforzar con oración insistente y con todas las fuerzas en superar los obstáculos todavía existentes, intensificando el diálogo teológico y reforzando la colaboración entre nosotros”, los animó el obispo de Roma, quien en enero había dedicado su intención mensual de oración a la unidad entre los cristianos, uno de los ejes de su Pontificado a través del diálogo ecuménico.
En esa línea, pidió reforzar la colaboración “sobre todo al servicio de los que sufren mayormente”, en un contexto en el que “se experimentan graves laceraciones y nuevas formas de exclusión y marginación”.
Durante su discurso, el pontífice recordó además su viaje a Lund, Suecia, del 31 de octubre pasado, cuando visitó el país escandinavo para conmemorar los 500 años de la reforma de Martín Lutero.
Además, Francisco expresó en repetidas ocasiones sus convocatorias al diálogo entre católicos y el resto de la cristiandad, como durante su viaje apostólico de 2016 a Armenia y Georgia, países de minoría católica.
