Número de edición 8481
La Matanza

Reclaman falta de accesibilidad para personas con discapacidad en la ES N°141

Reclaman falta de accesibilidad para personas con discapacidad en la ES N°141

Diario NCO conversó con dos de las familias que se encuentran reclamando la falta de instalaciones para que sus hijos con discapacidad motriz puedan acceder normalmente al establecimiento.

Por LUCÍA AMARILLA CARDOZO
lucia.amarillacardozo@gmail.com

Germán, Sofía y Camila son tres estudiantes con discapacidad motriz que asisten a la ES N°141 ubicada en González Catán, el cual actualmente es centro de reclamos debido a la falta de accesibilidad para que los tres alumnos puedan llevar a cabo sus estudios.

El edificio de la institución fue construido para ser una sola escuela, sin embargo, la misma fue dividida en dos partes, por lo que en la mitad del recinto funciona la escuela primaria mientras que en la otra mitad se encuentran los 750 alumnos que componen la escuela secundaria.

No obstante, el principal problema radica en que dicho lugar no cuenta con las instalaciones necesarias para que el establecimiento educativo sea accesible para personas con discapacidad: el mismo solo cuenta con un baño para discapacitados en la sección de la primaria y no hay rampas o ascensores para subir al primer piso, donde se desarrollan las clases del secundario y se encuentra la biblioteca.

Tres estudiantes, la misma situación injusta

Sofía y Camila acuden al quinto año, mientras que Germán comenzó su primer año en la ES N°141. Los tres estudiantes, además de estar atravesados por su situación de discapacidad motriz enfrentan un problema aún mayor: la falta de accesibilidad y la indiferencia de las autoridades escolares.

Verónica, madre de Germán, comentó que durante el paso de su hijo por la EP N°58, la cual se encuentra al lado del secundario, no hubo mayores problemas ya que las clases se daban en la planta baja y había un baño adaptado para personas con discapacidad, sin embargo, el cambio al nivel superior de educación trajo aparejado los conflictos.

Con respecto a Sofía, su madre, Graciela, aseguró que su hija estudió siempre en dichos edificios por la cercanía a su hogar y la facilidad que eso significaba, sin embargo, en todo el recorrido que su hija realizó por la secundaria, ha reclamado infinidad de veces para que el establecimiento tenga rampas, reparen el ascensor y realicen un baño adaptado.

Las soluciones que dieron los directivos en todos estos años siempre fueron provisorias y nunca han buscado realizar un verdadero arreglo edilicio en la secundaria, no solo por Germán, Camila y Sofía, también por futuros estudiantes que puedan estar en situaciones similares.

Ambas madres comentaron que en la parte trasera de la escuela primaria hay dos salones que los cursos de Camila y Sofía los utilizaban para estudiar, pero por diferencias entre los directivos, esa pequeña ayuda finalizó y comenzaron las dificultades.

Para contener la situación, la escuela solicitó un aula modular, sin embargo, el primer día de clases, ambas madres afirmaron que el director, Alberto Cuadra, las detuvo en la entrada del recinto para advertirles que sus hijos no iban a tener clases “porque no hay salón”. Graciela aseguró que “pasaron como tres semanas para que traigan uno de esos”.

No obstante, el problema que eso traía aparejado era que la capacidad de los salones era reducida y los cursos de Germán, Sofía y Camila debían rotarse constantemente para tener clases.Finalmente, tras un acuerdo provisorio entre los directivos, se habilitaron los salones del fondo del establecimiento por lo que los tres alumnos volvieron a tener clases normalmente en la planta baja.

Estas soluciones siguen siendo temporales y los estudiantes con discapacidad no tienen rampas o ascensores para subir. ” Es triste verlos a ellos que no pueden estar arriba. La biblioteca está en el primer piso, ellos nunca van a conocer la biblioteca”, lamentó Verónica, madre de Germán.

Una comunidad educativa con falta de empatía

Uno de los principales problemas que atraviesan las madres de los estudiantes es la falta de apoyo por parte del director de la escuela secundaria, quien es el principal responsable por velar que el derecho y acceso a la educación de los menores se cumpla.

” No hay manera que luche el director con nosotros, no va al Consejo a firmar. Desde el Consejo nos pidieron que tiene que estar él”, aseguró una de las madres, quien además remarcó que el mismo les sugirió que cambien a sus hijos de escuela ya que el establecimiento no proveerá la accesibilidad necesaria.

Del mismo modo remarcaron que “ a veces no hay apoyo de los otros padres que tienen a sus hijos sanos”, lo cual es sumamente importante para generar más visibilidad a la problemática que atraviesan los chicos, además de recalcar que las mejoras edilicias beneficiaría a toda la comunidad educativa.

“Ni el colegio ni el director están preparados para tener chicos discapacitados”, remarcaron las madres, quienes continúan en su incansable lucha para que sus hijos e hijas puedan cumplir su derecho a estudiar dignamente.

Te pueden interesar:
https://diario-nco.net/radio

https://facebook.com/diarionco

Artículos Relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver al botón superior