El gimnasio “El Campeón” ubicado a metros de Av. Crovara y Cristianía de Isidro
Casanova, reune a diario a una decena de jóvenes pugilistas que mientras se forman en el
“arte de pegar y no dejarse pegar”, bajo la atenta mirada del profesor Héctor “El Hacha”
Juárez, sueñan con un futuro donde sus nombres aparezcan estampados en las grandes
marquesinas. Junto a su pupila y a una de las promesas del lugar, Patricia” “Pato” Pérez, el
entrenador comentó distintos aspectos del duro deporte de los puños.
“En realidad, el principal objetivo es que los chicos no anden en la calle y se acostumbren a hacer deporte, porque el resto es una consecuencia de las cualidades o no que tenga el aspirante. Cuando un chico o chica se arrima al gimnasio se le hace una prueba y vemos si está para desarrollar una actividad boxística recreativa o competitiva” arrancó diciendo el entrenador, ex boxeador de la década del ‘80/90 que prepara a los jóvenes boxeadores. Luego sostuvo que “los únicos secretos para que un púgil pueda llegar a ser un boxeador medianamente conocido está en el gimnasio, en la disciplina que tengan en el día a día y por supuesto, en las condiciones de cada uno” y añadió: “hay cuestiones que se pueden enseñar y otras que se pueden mejorar, pero lo esencial está en la capacidad y en la vocación que tengan para encarar esta actividad”.
El abc del boxeo
Más adelante “El Hacha” Juárez contó que “una de las primeras cosas en que se pone
el acento, es que los chicos aprendan a pararse y a caminar el ring. El tema de las piernas es
fundamental, porque si bien este deporte se basa en la potencia y en la capacidad técnica
se tenga en los puños, es imposible que se progrese sino se aprende a boxear bien afirmado y a sabiendo utilizar las piernas para conseguir la distancia adecuada, o para salir lateralmente o hacia atrás de una situación complicada” y también se refirió a los tiempos de preparación de cada postulante diciendo que “no hay una regla al respecto. Hay chicos o chicas que vienen, se les toma una prueba y siendo totalmente novatos, en menos de un mes están para subirlos a un ring, con las reservas del caso, ya que hay que ser muy cuidadosos y tener sumo cuidado con el adversario que se les va a poner enfrente. No es cuestión de apurarlos, sino que el objetivo es que se vayan metiendo de a poco en la competencia y que vayan perdiendo los miedos, por lo que normalmente se eligen rivales equivalentes”.
En ese mismo sentido, en formador de boxeadores comentó que “debido al importante auge que la actividad ha tenido en los últimos tiempos, se ha armado un circuito boxístico bastante interesante y por eso ahora es mucho más fácil conseguir peleas. El hecho de haber sido boxeador profesional hace que sea medianamente conocido en el ambiente y eso me posibilita tener los contactos necesarios para recibir invitaciones y hacer presentaciones, llevando a los púgiles a competir en distintos lugares del gran Buenos Aires, donde todos los fines de semana se organizan veladas”.
Otro tópico que abordó el entrenador tiene que ver con en denominado “entrenamiento invisible” que invariablemente deben poseer los jóvenes. “Siempre digo que el trabajo en el gimnasio es prioritario, pero para poder progresar hay componentes no menos importantes que se deben tener muy en cuenta y los mismos pasan por la alimentación, el cuidado físico y todo a lo que hace a la formación de cualquier deportista. El resto se ejecuta en el gimnasio y este aspecto tiene que ver con que aprendan y perfeccionen la técnica natural que posean. Para eso hacen sombra, guantes, y le dan a la bolsa para adquirir mayor fortaleza en sus puños” y reconoció no ser demasiado afecto a que sus pupilos hagan “fotting”, ya que sostiene que “según mi criterio, no aporta demasiado a la formación del boxeador amateur, ya que mi tarea esencial apunta a mejorar las condiciones de los distintos pugilistas”.
“Pato” Pérez, el futuro en sus manos
Patricia “Pato” Pérez (21) es una de las grandes promesas que tiene el gimnasio “El Campeón”. Con 25 combates amateur sobre sus espaldas, la jovencita oriunda de Isidro
Casanova aspira a progresar en la actividad, ya que la viene remando desde hace más de 5
años y cree haber llegado a la etapa en la que pretende cosechar lo asimilado durante todo
ese tiempo.
“Claro que tengo ilusiones y por eso me esfuerzo y trabajo todos los días para en un
tiempito poder convertirme en profesional” manifestó la boxeadora que confesó no tener
“ninguna referente que colme mis expectativas y sea un espejo donde poder mirarme”,
aunque admitió que valora “el profesionalismo y la carrera que ha llevado a cabo la ‘Tigresa’ Marcela Acuña”.
La carrera de Patricia tiene como principal impulsor y sponsor al Comedor Comunitario
“La Pulguita” de La Tablada, donde de la mano de su titular, Rubén Pellicciotti, se la contiene y se la ayuda para que pueda desarrollar la actividad.
“Tiene grandes condiciones y si se sigue esmerando y corrigiendo algunas cositas, va a
llegar lejos” sostiene “El Hacha” Juárez, su entrenador, quien apuntó que “el mayor déficit
de ‘La Pato’ pasa por lo mental, dado que a veces no puede controlar su ansiedad y los nervios suelen ser su mayor enemigo, algo que es perfectamente subsanable”.
“Le damos una mano porque es una muy buena piba y además porque tiene
condiciones y contracción al trabajo” dijo Rubén Pellicciotti, quien también tiene a su hijo
Gabriel (15) trabajando a diario en el gimnasio y cuyo debut como boxeador amateur se
produjo en octubre del año pasado.
soy entrenador físico de boxeo y tengo chicos para boxear, pero ante me gustaría que si los podrían ver las condiciones que tienen y si es posible conseguirle alguna pelea, desde ya muchas gracias los saluda atentamente luis guerrero entrenador físico
Me pasan la dirección quiero aprender boxeo por favor