El día Miércoles 10 de julio a las 12 horas se llevo a cabo una conferencia de prensa que se brindo en el Salón de Conferencias de La Legislatura Porteña a fin de informar las novedades sobre la causa correspondiente al caso de Jonathan “Kiki” Lezcano y Ezequiel Blanco.
Allí estuvieron presentes Angelica Urquiza, madre de Lezcano y los abogados Juan Manuel Combi y Adriano Agredo, Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Vanesa Orieta, hermana de Luciano Arruga, Pablo Ferreyra, hermano de Mariano Ferreyra, Pablo Pimentel, de la APDH de La Matanza, y Luciana Pol, del CELS.
“A mi hijo lo seguían matando cada vez que no me daban información cuando iba a buscarla”, comentó Angélica. A su vez, Pablo Ferreyra afirmó que “cuando hablamos de democratización de la Justicia, tenemos que pensar y profundizar en la celeridad de los procesos. Tanto en el caso de Luciano Arruga como en el de Kiki no hay imputados, esto no colabora en reparar el dolor de las familias”.
“Sabemos que en los barrios pobres no va ningún medio, no va nadie. Es tan natural y por algo será. Por algo lo hicieron desaparecer. Ese ‘por algo será’ hay que sacarlo de nuestras bocas” asevero Angélica. Al mismo tiempo, Pablo Pimentel, líder de la “Asamblea por los Derechos Humanos de La Matanza”, ratificó que “los derechos humanos, tienen una sola definición, se defienden o se violan, no hay término medio, y en estos casos, se están violando”.
El hecho ocurrió el 8 de julio de 2009, cuando el agente de la Policía Federal Daniel Veyga disparó contra los dos jóvenes con su arma reglamentaria y luego aseguró, en un escrito que los jóvenes querían robarle su auto y actuó en defensa propia. Según Veyga, Kiki y Blanco entraron en su coche vieron su uniforme policial en la parte de atrás y quisieron comenzar un enfrentamiento para asesinarlos, en la causa, hay un solo testigo, un vecino que pudo ver la supuesta tentativa de hurto, dijo oír tres disparos, pero aun no se sabe con certeza si pudo presenciar todo lo ocurrido.